Por Wendy Riojas
Monclova, Coahuila. – Caídas y desmayos por golpes de calor sufrieron adultos mayores y personas con discapacidad que fueron concentrados en la escuela primaria “Josefa Ortiz Soto” ubicada en la Colonia Leandro Valle para el trámite de cambio de tarjeta.
El día de ayer la Secretaría de Bienestar en la región centro citó a los adultos mayores que cobraban la pensión del Bienestar del Adulto Mayor a través del Banco Bancomer, Azteca y Banorte y a las personas con discapacidad que cobraban a través de otros bancos.
La intención era migrarlos al Banco de Bienestar como lo hicieron con los adultos mayores y las personas con discapacidad que cobraban a través del Banco Citibanamex, sin embargo, no pensaron en el sol y en las altas temperaturas.
Esto, luego de que hacían fila al llegar a la institución educativa donde algunos se desmayaron y otros cayeron, por el intenso calor, por lo que fue necesario colocar un toldo para protegerlos de las altas temperaturas.
La señora Esther Miranda de 67 años denunció: “el calor está terrible, una señora ya se desmayó en la fila, por el calor, y ahorita entró un muchacho y dijo ‘mi mamá se cayó afuera, pero, aquí están los papeles’, porque no soportan el calor”.
Armando Rodríguez de 82 años denunció: “El calor está inmensamente feo y somos puros viejos. Yo llegue a las 8 de la mañana y no ha salido mi trámite. Me pusieron un banco, luego otro, luego otro. Y Aquí soportando el calor”.
Y mientras descansaba en su andadera decía: “Yo cobró en HSBC y me pusieron Banco Azteca, luego Banorte y apenas ahorita arreglé, vamos a esperar que nos hablen. Ya tenemos de 3 a 4 horas esperando”.
Algunos familiares de adultos mayores y personas con discapacidad entraban a la institución educativa con vasos con hielo, sueros, agua y refrescos toda vez que la temperatura alcanzó los 43 grados centígrados.
Don Rubén Gutiérrez de 81 años, mencionó: “Las personas son las encargadas de revisar la documentación, pero no hay personas que te pregunten si estás bien, si desayunaste, si te sientes bien, no hay personal”.
Y mientras su hijo le echaba aire con una carpeta mencionó: “El calor está bastante fuerte; es que están varias colonias concentradas y es más tardado atenderlas, pero más temprano había más gente”.
Y aunque el plantel educativo tenía techo estructural era imposible proteger a más de 200 adultos mayores que acudían con bastón, andadera, silla de ruedas, a una temperatura de 43 grados centígrados.