SALTILLO, COAHUILA. – La Casa del Migrante se enfrenta a una ola de calor sin precedentes que ha llevado a un incremento del consumo de agua en un 25 por ciento en las últimas semanas.
A pesar de los desafíos que conlleva el desplazamiento en estas condiciones climáticas extremas, el número de personas en situación de tránsito se mantiene constante.
El director del albergue, Alberto Xicoténcatl, informó que durante este período han atendido tres casos de posibles golpes de calor entre los migrantes que buscan refugio. Afortunadamente, estas situaciones no han tenido consecuencias graves.
«Estamos haciendo todo lo posible para ahorrar agua, intentando limitar su uso para las necesidades básicas y priorizando el consumo personal en este momento», comentó Xicoténcatl.
El albergue enfrenta actualmente una deuda de aproximadamente 400 mil pesos con Aguas de Saltillo. Hasta ahora, el servicio no ha sido interrumpido, pero se ha detectado una disminución en la presión del flujo de agua.
En cuanto al número de migrantes que ingresan al albergue, el director señaló que se ha mantenido alrededor de 120 personas durante esta temporada.
«La mayoría de ellos vienen de lugares con climas muy calurosos, por lo que el calor les afecta aún más. Aunque no dejan de sufrir por el calor, hemos atendido tres casos de personas mareadas o a punto de desmayarse, utilizando compresas de agua tibia», explicó.
Finalmente, Xicoténcatl hizo un llamado a la ciudadanía para que done gorras o sombreros que protejan la cabeza de los migrantes de los intensos rayos del sol. Aquellos interesados en colaborar pueden entregar estas prendas en las instalaciones del albergue, ubicado en Juan de Erbaez número 2406, colonia Landín.