CIUDAD DE MÉXICO.-En un día laboral, decenas de mineros acudieron al acto político de Claudia Sheinbaum en Lázaro Cárdenas, Michoacán, donde escucharon sus razones para aspirar a la Presidencia de la República.
Siete secciones del sindicato que dirige el senador Napoleón Gómez llevaron a casi la mitad de asistentes del mitin a favor de la Jefa de Gobierno con licencia.
«La gente se pregunta: ¿Y esos quiénes son? Son los mineros que están con Napoleón», arengaba el secretario general de la sección 271, Francisco Nava, frente a la aspirante presidencial.
«¡Se ve, se siente, la mujer está presente! ¡Mineros unidos, con Claudia jamás serán vencidos!», remataban los sindicalizados, quienes portaban playeras rojas.
Otro grupo de asistentes fueron llevados por Itzé Camacho, Alcaldesa de Lázaro Cárdenas, quien pidió licencia para dedicarse de lleno a organizar la campaña de Sheinbaum en la entidad.
Decenas de asistentes portaban cartulinas agradeciendo a la Edil.
«Itzé Camacho te apoya», se leía en algunas de ellas.
«Esa es una demostración que no luchamos por cargos, por puestos», aseguró la contendiente, quien llegó a Puerto Vallarta y se trasladó por tierra a ese municipio.
En su discurso, Sheinbaum insistió que lo importante del movimiento ahora es qué pasará cuando el Presidente López Obrador deje la Presidencia.
«Hoy el Presidente Andrés Manuel López Obrador va a cumplir su quinto año de gobierno y entonces va a venir un proceso para poder saber quién va a venir después del Presidente Andrés Manuel López Obrador», dijo.
Como lo ha hecho desde el 19 de junio en todas sus asambleas recordó que habrá una encuesta para definir al Coordinador de Defensa de la Transformación, y se realizará a finales de agosto, y quien resulte electo es el que dará continuidad al proyecto del Primer Mandatario.
En la transmisión del evento, que duró casi una hora, en redes sociales, se quitó el audio ambiental para que no se escucharan las porras a favor de la aspirante presidencial, sólo se prendía el micrófono para los discursos.
Sin embargo, los asistentes le gritaban «¡Claudia!» y «¡Presidenta!».