Por: Alexis Massieu
La Capital del Acero tuvo un amargo amanecer de domingo al darse a conocer que dos jóvenes perdieron la vida al derrapar la moto en que viajaban, esto en una fatídica curva en el Libramiento Oriente, aproximadamente a las 5 de la mañana, los cuerpos fueron encontrados dos horas después.
Los infortunados jóvenes, Christopher Manuel y Néstor Othoniel, de 16 y 14 años, viajaban en una motociclista y quien manejaba perdió el control, saliendo de la cinta asfáltica y lesionarse al golpearse contra rocas y terracería.
En el mismo lugar había cruces, testigos mudos de un nuevo accidente de fatales consecuencias.
Fueron automovilistas que pasaron por el lugar los que vieron la escena y acudieron a un punto obligado a la presencia policiaca, la Puerta 4, ahí le informaron a los agentes de los hechos.
Después se daría a conocer que una trágica muerte fue la que encontraron dos jóvenes que viajaban a bordo de una motocicleta y que al tomar una pronunciada curva en el Libramiento Oriente se fueron derecho, derrapando y salieron de carretera, cayendo en una pendiente entre rocas y maleza, a la altura de la Colonia Córdova.
Del hallazgo de los dos cuerpos y la motocicleta fueron alertados cerca de las 7 de la mañana policías preventivos que realizaban rondines de prevención y vigilancia sobre la Avenida Puerta 4, ambos cuerpos ya no contaban con signos vitales, paramédicos de Cruz Roja encontraron a su arribo ya el área delimitada.
Policías preventivos como primeros respondientes resguardaron el área, asimismo Policía Civil Coahuila dándose vista a la Agencia de Investigación Criminal los cuales acompañados de Servicios Periciales tomaron conocimiento de los hechos
Los cuerpos de los jóvenes que aún están sin identificar quedaron entre enormes piedras y la motocicleta color negro con rojo a un lado destrozada y curiosamente a unos metros de una cruz que recuerda como años atrás en ese mismo lugar un tráiler con doble caja arrollara y diera muerte a un motociclista.
Se dio la autorización de los servicios funerarios para hacer el levantamiento de los cuerpos, los cuales ya presentaban rigidez lo que hacía presumir llevaban varias horas de haber fallecido.
De entre los curiosos, una de las vecinas aseguró haber escuchado como a
las 5 de la mañana un fuerte golpe a lo cual no le dio importancia y siguió durmiendo, otra vecina que llego al lugar preguntaba angustiada que si no eran sus sobrinos Miguel y Omar que desde anoche y la madrugada andaban tomando y en la motocicleta y aun no sabían nada de ellos.