Alexis Massieu
Tras meterse a un domicilio en la colonia Pequeños Granjeros, en San Buenaventura, un joven adepto a las sustancias tóxicas fue detenido y enviado ante un Juez penal el día de ayer, Juan Israel “N”, se enfrentó al dueño de la casa, quien, pese a que el ladrón traía una navaja, logró someterlo y entregarlo a las autoridades.
Según la acusación hecha ayer por la mañana, de parte del Ministerio Público, fue el pasado 16 de julio, a las 14:20 horas, que al encontrarse drogado, Juan Israel, se metió a un domicilio ajeno, siendo visto por el propietario Juan Pablo “N”, quien se encontraba cerca de ahí.
El afectado sorprendió a Juan Israel en una de las habitaciones, y le dijo: “Qué estás haciendo aquí”, recibiendo por respuesta, según la denuncia, un navajazo que le habría dejado una lesión de 7 centímetros en el abdomen, para en un forcejeo terminar enseguida en el suelo.
Juan Pablo “N”, logró someter al escuálido intruso, hasta que llegaron los policías municipales, gracias a una llamada hecha por su compadre José Martín “N”, testigo de los hechos.
Cuando se le dio a Juan Israel “N”, la oportunidad de contestar a los cargos que se le hicieron por el delito de robo calificado por cometerse en un domicilio y con violencia, decidió guardar silencio, y por consejo de su abogado, solicitó un plazo de 144 horas para poder aportar pruebas de su inocencia.
Por esa razón, la audiencia inicial relativa a la causa penal identificada como la 957/2023, fue suspendida, y se reanudará el próximo 24 de julio, para que se decida si lo vinculan o no a proceso.
El acusado, pese a usar aparentemente, un exacto o “cutter” como arma, y amenazar a la víctima, podrá seguir con su juicio en libertad, debiendo para ello, cumplir con varias obligaciones, como portar un localizador electrónico, y no acercarse a la víctima o a su domicilio, a menos de 50 metros.
Tras el arresto, al presunto ladrón se le aseguraron, además de la navaja, una bolsita con mariguana y un teléfono celular, propiedad del afectado, valorado en 2 mil 100 pesos.