Por Wendy Riojas
Tras más de 80 años de historia la empresa Altos Hornos de México se hundió en el silencio; el silbato que se escuchaba en cada cambio de turno se apagó por completo, provocando nostalgia en muchas generaciones de Monclova y la Región Centro.
Arnoldo Bermea, Cronista de la Ciudad, comparte con el periódico LA PRENSA DE COAHUILA una remembranza de los inicios de la empresa Altos Hornos de México, sus peos momentos, huelgas y la lamentable situación que atraviesa en 2023.
Sin embargo, refiere que nunca había enfrentado una situación similar a la que atraviesa en 2023, donde anuncian el colapso de la Coquizadora, el fin del silbato, y el monitoreo de la calidad del aire.
INICIOS DE AHMSA
El cronista de la Ciudad revela que la llegada de la empresa Altos Hornos de México (AHMSA) cambio el ‘letargo’ que tenía la Ciudad de Monclova en los años 40’s, la cual describía como amodorrada, tranquila y pacífica.
Incluso menciona que en 1941-1942 el periódico ‘Monclova’ que hacía el periodista Encarnación Peña publicó la posibilidad de que una Fundición se instalaría en la Ciudad en los próximos años o meses.
“Acababa de asumir como Gobernador del Estado, Benecio López Padilla, y un joven Monclovense de 27 años era el Secretario de Gobierno, Francisco López Serrano, a quien mandan con el Presidente de la República”.
Refiere que lo mandan con Manuel Ávila Camacho, en aquel entonces Presidente de la República para gestionar la llegada de la Fundición, luego llamada Altos Hornos de México, a la Ciudad de Monclova, Coahuila.
“El Presidente de la República le dijo ‘se sacaron la lotería’, y se hizo un acuerdo de cabildo en 1942 donde lo declaran “Hijo predilecto”, le reconocen su intervención para que se direccionara AHMSA a Monclova”.
Relata que la llegada de AHMSA cambio totalmente el escenario de Monclova ya que llegaron personas de otros municipios y Estados de la República Mexicana porque había una empresa que llegó a ser la capital del acero en américa latina.
“Antes vivían de la agricultura, el algodón, la nuez, el ganado y las fuentes de ingresos eran limitadas pero con la llegada de AHMSA fue un boom, mucha transformación y movimiento en la Ciudad”.
Recuerda la creación de la escuela Sección 147, la escuela El Socorro, la escuela Cuauhtémoc, así como la construcción de casas tipo americanas en la Colonia Obrera Sur de Monclova, con paseos, camellones y grandes terrenos.
“La empresa fue creciendo, hicieron otro Horno, la Coquizadora, el BOF y AHMSA iba comprando terrenos por expansión, así como la llegada de muchos ingenieros gracias al ingeniero Harold R. Pape y su esposa”.
Incluso revela que llegaron negocios, tiendas de ropa, abarrotes, porque había una economía fuerte, pujante, así como la creación de hospitales y la llegada de otras empresas a la Ciudad.
SUPERAN MALOS MOMENTOS
Entre los peores momentos que recordó se encuentra la huelga de 1977 cuando la empresa a través de un comunicado afirmaba que el movimiento representaba una pérdida neta diaria de 20 millones de pesos.
El líder Felipe Valdés Ibarra encabezó el movimiento en 1977, donde supuestamente más de 10 mil obreros rechazaron la firma de revisión al contrato colectivo del trabajo.
En aquel entonces se aseguraba que con las concesiones pactadas, había llegado al límite de sus posibilidades económicas, pues ya había concedido aumentos y prestaciones que absorbían la casi totalidad de sus utilidades esperadas en el año 1977.
Incluso afirmaban que se eliminaban las posibilidades de generar reservas de reinversión para crecimiento, Por lo que se exigió un recuento, ya que en la junta en que se había decidido ir a la huelga, se había contado con la presencia de 2 mil 500 trabajadores y de ellos, el 50 por ciento eran eventuales, por lo que estimaba que la votación que allí se manifestó, no representaba la mayoría de los 10,000 trabajadores afiliados a la Secc. 147.
Incluso revela que antes de 1977 había ‘paros locos’ donde los Sindicatos exigían espacios, premios de producción, bonos de asistencia, sin embargo, la huelga de 1977, fue la que duró buen tiempo, y fue más fuerte.
AHMSA DEJA DE PITAR
Con mucha nostalgia, el Cronista de la Ciudad, recordó que la empresa Altos Hornos de México pitaba a base de vapor a las 3 de la tarde y a las 11 de la noche, sin embargo, ahora es un silencio sepulcral.
Con el silbato muchas familias de Monclova identificaban la hora, incluso, marcaba las actividades que se hacían en el hogar, como la llegada del esposo del trabajo, la hora de comida, la hora de dormir, la hora de meterse, etc.
Sin embargo el cronista declaró: “Ya no pita, te da un sentimiento, ya no oyes el silbido. Cuando todos los ciudadanos lo tenemos asociado a nuestra vida, era un vínculo de identidad, te entra un sentimiento, así nos identificábamos como monclovenses”.
Dijo que dejo de pitar hace 1 o 2 meses creando tristeza en los monclovenses, aunado a la falta de producción, el cierre de departamentos, la perdida de energía eléctrica, entre otros factores que envuelven la empresa Altos Hornos de México.
“Esta cuestión que nos identifica, que nos da sentido de pertenencia, me afectó mucho, de manera personal, el pito era algo que teníamos asociado a los monclovenses y hace mes y medio dejo de sonar”.
“Yo platicaba con unos amigos cuando dejo de pitar, es un vinculo de identidad, yo lo interpreto así, te da un sentimiento…dejo de sonar…tiene como mes y medio, eso a mí, que nos identifica como que me afectó mucho”.
SUSPENDEN MONITOREOS
El Cronista mencionó que la empresa Altos Hornos de México enviaba 2 o 3 veces por semana a ingenieros para monitorear la contaminación en la calle Hinojosa de la Zona Centro, por la biblioteca Margarita López Serrano.
Y refiere: “ahorita ya no van a monitorear, la gente se acostumbró y también se preguntan ¿si el agua del Río Monclova lo direccionaban para consumo industrial ¿Dónde está atorada?, puede resurgir el río”.
VIVIMOS PERIODO PREOCUPANTE
El cronista de la Ciudad, Arnoldo Bermea, admitió que la situación de la empresa Altos Hornos de México es preocupante para todos los sectores de la Ciudad, ya que, es el eje de muchas empresas de la Región.
“Se apaga AHMSA y se apaga mucha actividad económica en la Ciudad. La situación actual es mucho muy grave, mucho muy delicada. Ha habido una lluvia de declaraciones y de notas periodísticas pero uno ya no haya que creer, no sabemos qué está pasando”.
Y señaló: “Yo deseo lo menor, pero esto, jamás se había vivido, la gente se empieza a ir, sobre todo los jóvenes y en Saltillo tienen déficit de mano de obra porque las empresas están concentradas allá”.
Sin embargo mencionó que posiblemente pondrán los ojos de Monclova ya que quieren aprovechar la mano de obra de Monclova y la Región Centro, donde hay otras actividades que le dan vida.