El fin de semana, María Elena Hernández Varela, de 43 años, fue localizada muerta en el Río Escondido a la altura del libramiento Ancira Norte, por lo que la Fiscalía General de Justicia detuvo a una mujer, que ahora se sabe, es la consuegra.
La Fiscalía confirmó que la mujer falleció víctima de dos disparos de arma de fuego, uno en el estómago y otro más en la espalda, además de los golpes y lesiones con arma blanca que presentaba, dio a conocer Rogelio Gómez Rodríguez, coordinador de ministerios públicos.
El funcionario dijo que se logró la detención de la presunta responsable Yesica N por el delito de homicidio, y que ésta es la consuegra de la fallecida.
Se puso de inmediato a disposición de un juez para que decida su situación jurídica dentro de la audiencia inicial.
Dentro de las investigaciones trascendió que la responsable del homicidio, Yesica N, junto con su hijo menor de 15 años, abordaron a la fallecida en la carretera 57, la subieron a la camioneta Dodge Caravan verde, la privaron de su libertad, le dispararon primero en el estómago y al querer pedir ayuda, le disparó en la espalda, y luego la tiró al Río Escondido.
En ese lugar, el fin de semana fue localizada sin vida por las autoridades.
La presunta responsable se deshizo de la camioneta de la ahora occisa en un predio baldío de la colonia San Joaquín.
Se supo que las dos mujeres tienen un parentesco, son consuegras y que el principal problema es que Yesica N estaba enfurecida porque María Elena (la ahora fallecida), no la dejaba ver a sus nietos, lo que generó la rabia y la asesinó a balazos.