MÉXICO.- Durante su conferencia de prensa, en Palacio Nacional, la secretaria de Educación Pública (SEP), Leticia Ramírez Amaya, afirmó que en ninguno de los libros de texto que se han revisado hasta el momento, aparece la palabra “comunismo”.
“En los libros que hemos estado refiriendo, proyectos de aula, proyectos de escuela, proyectos comunitarios, múltiples lenguajes, nuestros saberes, de cada uno de los grados, en ninguno de esos aparece la palabra comunismo”, afirmó.
Dijo que sí hay una referencia al comunismo en uno de los libros para los maestros, en un poema de Martin Niemöller, que a la letra dice: “Cuando los nazis vinieron a buscar a los comunistas, guardé silencio, porque yo no era comunista”.
Titular de la SEP, Leticia Ramírez Amaya encabeza la conferencia de prensa sobre los nuevos libros de texto gratuitos en Palacio Nacional. Foto: Germán Espinosa/EL UNIVERSAL
Titular de la SEP, Leticia Ramírez Amaya encabeza la conferencia de prensa sobre los nuevos libros de texto gratuitos en Palacio Nacional. Foto: Germán Espinosa/EL UNIVERSAL
“Aparece, sí, en uno de los libros, que se llama Un libro sin recetas, para maestras y maestros, que habíamos estado explicando también, que es para dar un contexto”, explicó Ramírez Amaya.
Llama Redim a despolitizar tema de libros
La Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) hizo un llamado a despolitizar la discusión sobre los libros de texto y su rol en la educación de niñas y niños para centrarla en el interés superior de la niñez.
“La educación de la niñez no es un botín político, es un derecho de niñas, niños y adolescentes y ni siquiera se está hablando con ellos y ellas”, expresó en un comunicado la directora ejecutiva de este organismo civil, Tania Ramírez.
Argumentó que en “este aparente diálogo nacional tan extendido ha dejado fuera a los sujetos del derecho: niñas, niños y adolescentes . No hemos escuchado sus voces. Sería enormemente más valioso escuchar a la niñez y adolescencia, más que a tantas voces que han hecho de este tema opinología politizada sin haber asumido el interés superior de la niñez”.
Expresó que se estableció una disputa a partir de un falso dilema: contenidos sin errores y bien construidos o contenidos deficientes y cargados “a la izquierda”.
Precisó que promover y proteger contenidos progresistas y que promuevan derechos no debe estar desvinculado de la responsabilidad de realizarlos con absoluto profesionalismo pedagógico y programático.