Por Wendy Riojas
Los uniformes escolares registraron en algunos lugares un aumento de 20 a 40 pesos por prenda debido al ajuste al precio de las telas en medio de la crisis económica que se vive por la situación de la empresa Altos Hornos de México.
Cabe mencionar que la situación económica que generó la pandemia y la crisis en el desabasto de suministros provocado por la guerra entre Ucrania y Rusia impactó en la industria de las telas en México.
Incluso medios nacionales refieren que en las telas hubo un aumento del 30 al 40%, depende el tipo de tela, si se compra por kilo o por rollo, lo que impacta en el precio de uniformes que se ofrecen en la región centro.
La playera de preescolar se vende en 230 pesos, de primaria en 240, de secundaria y preparatoria 300 y 320 pesos; el precio de la falda desde 275 hasta 330 (extra grande) la falda y el chaleco 460 pesos y el pantalón 500, cuando en años anteriores tenía un costo de 460 pesos.
Rubí Goytia, propietaria de Bordados Rubí, uniformes escolares, ubicada en el pasaje Bomer, refiere que la afluencia está tranquila en comparación a años anteriores, posiblemente por la situación de Altos Hornos de México.
Y menciona: “Generalmente la gente viene el mero día y te dice: ‘ya lo ocupo, porque entra el lunes’ y por lo pronto tenemos movimiento del 30 por ciento, cuando en años anteriores teníamos del 80 o 90 por ciento”.
Refieren que buscan recuperar lo que gastan de renta, luz, agua, mantenimiento, impuestos, contadora, salarios, por lo que esperan que mejoren las ventas en los próximos días con el inicio del ciclo escolar 2023.
Y señaló: “Queremos recuperar un poquito. Todo el año pagas rentas, empleadas, impuestos, ahora con el inicio de clases esperas la venta a ver si te queda poquito, pero, no se ha visto, se supone que son fechas fuertes”.
Y aunque refieren que después de la pandemia palparon una recuperación económica en el año 2022 con el regreso a clases presenciales ahora ven muy tranquilo posiblemente por la situación de AHMSA o el cierre de la Calle Miguel Hidalgo.
Y mencionó: “Yo creo que es la situación de AHMSA, porque el año pasado que nos dieron chanza de vender después de la pandemia se agarró la venta y ahora está muy tranquilo, pasa poca gente”.