Kokito de Dulce demostró que la creatividad y el ingenio pueden superar cualquier obstáculo económico.
En medio de tiempos económicos difíciles antes del regreso a clases, el payaso Kokito de Dulce, originario de Tampico (Tamaulipas), se ha convertido en un verdadero artista de la estrategia para asegurar que no falte nada en la lista de útiles escolares.
Con once años de experiencia como payaso, Kokito es conocido por llenar de risas los autobuses del transporte público y los patios de las casas. Sin embargo, cuando llega la temporada escolar, también es el protagonista en las aulas, ¡y todo con un propósito noble!
Este artista de 28 años ha encontrado una forma única de financiar la educación de sus dos hijas que están en la educación básica. Kokito ofrece sus shows de payaso a cambio de apoyo para comprar los útiles escolares de sus pequeñas.
Su historia se ha vuelto viral en las redes sociales, y ha demostrado que la creatividad y el ingenio pueden superar cualquier obstáculo económico. Kokito comenzó a publicar su estrategia en sus cuentas personales y rápidamente se hizo famoso, con la comunidad aplaudiendo su determinación y originalidad.
«La impresión de la gente es buena, ha respondido, algunas personas me piden las listas de los útiles, hay quienes me pidieron la tarjeta para depósitos, entonces hay varias páginas de comercios donde me están apoyando», dijo el payaso.
Aunque es un payaso, también es un padre que está dispuesto a hacer reír a cambio de ver a sus hijas equipadas para la escuela, y su labor no solo lo enorgullece, sino que también inspira a muchos otros padres a encontrar soluciones ingeniosas para los desafíos financieros.
El camino de Kokito no ha sido fácil, especialmente después de tres años difíciles en los que no pudo realizar eventos públicos debido a restricciones sanitarias. Sin embargo, su ingenio y perseverancia lo han convertido en un modelo a seguir para aquellos que enfrentan desafíos similares.
En tiempos en que los padres de familia buscan soluciones creativas para garantizar que sus hijos tengan todo lo necesario para la escuela, Kokito demuestra que el humor puede ser un aliado invaluable en la búsqueda de la educación de calidad.