Por Wendy Riojas
Este lunes, 28 de agosto, miles de adultos mayores celebraron el “Día del Abuelo” trabajando, ya que, buscan mantenerse activos, motivados, y al mismo tiempo, tener recursos económicos para salir adelante.
Tal es el caso de la señora María Dolores Hernández Macías de 63 años, quien tiene 5 hijos y 12 nietos y quien trabaja como empacadora en un reconocido centro comercial de la Ciudad para mantenerse activa y motivada.
En la entrevista relata: “Aquí tengo medio año como empacadora, pero, fui trabajadora doméstica durante 20 años, y lo hago porque quiere mantenerme activa, motivada, y mis hijos me dicen que sí, que es mi decisión”.
Y aunque tiene el apoyo de su esposo, de oficio mecánico, María Dolores, relata que todas las mañanas ingresa a las 7 de la mañana al Centro Comercial (Súper Gutiérrez) donde empaca los artículos de los clientes.
Actualmente vive con su esposo y una hija con discapacidad, quien padece epilepsia, por lo que apoya en los gastos médicos de su hija y en los gastos del hogar como alimentación y pago de servicios.
Y refiere: “Yo me siento bien contenta, quiero mantenerme activa y aquí trabajo cuatro horas, de 7 a 11 de la mañana, De hecho, hoy en el Día del Abuelo nos tocó trabajar y lo hacemos felices, entusiasmados”.
Lo mismo hace Rubén González Flores de 78 años, quien tiene 6 hijos y 14 nietos y quien labora como empacador en un reconocido centro comercial de la ciudad para mantenerse activo y tener un ingreso extra.
En la entrevista refiere: “¡Ya hasta soy bisabuelo! Y aquí andamos, echándole ganas, son poquitas horas, 4, pero como quiera te sirve de distracción, entramos a las 7 y salimos a las 11 y si me apoya la gente”.
Menciona que un hijo vive con él y que todos los días come en casa de una hija, que vive cerca del centro comercial y donde tiene 2 nietos, por lo que se siente muy querido y arropado por su familia.
Así como Jesús Chacón Martínez de 72 años, quien tiene 4 hijos y 7 nietos y quien labora con mucha responsabilidad y disciplina en un reconocido centro comercial desde que fue inaugurado.
En la entrevista relata: “A mis nietos me da gusto conocerlos, es como si fueran mis hijos, los quiero mucho y mis hijos siempre nos visitan, a mi señora y a mí y en el día del padre o en el día del abuelo tenemos convivencia”.
Y mientras lleva a cabo su trabajo como empacador menciona: “Aquí estoy echándole ganas desde que se inauguró Gutiérrez Sidermex y se lo agradezco a la tienda, porque nos ayudó bastante. La disciplina es lo bueno”.
“Mientras Dios me de vida aquí, hasta ahí, uno salé bien aquí, se lleva su mandadito, lo lleva a la casa, estamos bien, gracias a Dios, se completa para la compra de despensa, el pago de servicios, internet”.