Falso técnico en reparación se quedó con el electrodoméstico, mientras ella a sus 83 años trabaja 10 horas diarias en su fondita
Alberto Rojas Carrizales
LA PRENSA
Con una fuerza laboral que no envejece, doña María Elena Gándara, a sus 83 años de edad trabaja 10 horas diarias en su céntrica fondita, y aunque CFE le cortó el suministro eso no le preocupa, lo que sí le enfurece es que un falso técnico en reparación de lavadoras hace medio año le robó el electrodoméstico, en tanto el Ministerio Público olvidó el caso.
Doña María aseguró que el individuo de nombre Manuel se negó a devolverle la lavadora con valor estimado de 20 mil pesos que le regalaron sus hijos en un Día de la Madre, entregándole a cambio un desvencijado aparato equiparable a chatarra que no funciona absolutamente; añadió que cuando le reclamó el tipo respondió; -hágale como quiera-
Vanessa Lara Neira, del Centro de Medios Alternos de Solución de Controversias del Ministerio Público, con fecha 29 de marzo de 2023 envió la invitación NUT 369/2023 al acusado que vive en calle Morelos 516 de la zona centro, para un acuerdo con la quejosa, pero no asistió, desde entonces el caso está olvidado.
-Toda mi vida he trabajado, me levanto desde las 5:00 de la mañana, llegó a la fondita a las 8:00 horas y cierro a las 6:00 de la tarde, no tengo luz, pero eso ya lo veré más adelante, lo único que me enfurece es el abuso del individuo, es un bandido, un ratero, un aprovechado- añadió severamente indignada doña María Elena en su negocio de la plaza El Canónigo.
Mis hijos, dice enseguida, -quieren ir a reclamar al individuo, pero yo les digo que ese tipo no vale nada, que no vale la pena, que para eso está la ley, ante la cual insistiré esta semana entrante para que me entregue mi lavadora que seguramente vendió, o que me repare el daño con otra igual–
La octagenaria, sobrevive económicamente de la venta de tacos y gorditas en un pequeño local de la plaza El Canónigo, no tiene luz en el sitio, pero es –Todo Terreno- porque no la doblegaron ni las extremas temperaturas de 48 grados desde mayo anterior, los ingredientes y refrescos los mantiene en una hielera.
Espero, finalizó doña María Elena, quien a los 36 años de edad llegó a Monclova proveniente del ejido Tacubaya, San Pedro de las Colonias, -que las autoridades del Ministerio Público envíen a la policía a entregarle el citatorio porque la ocasión anterior, yo misma se lo llevó, burlándose de mi persona-