“La sociedad está ofendida, no puede ser posible que esté en riesgo la seguridad a consecuencia de que un grupo de personas”; comerciante
Por: Alberto Rojas Carrizales
LA PRENSA
El comerciante Raúl García lamentó que un grupo de personas por asuntos sindicales hayan puesto en jaque a las autoridades y generado nerviosismo en la ciudad con afectación al comercio y la educación, por lo que consideró que lo correcto es “aplicar drásticamente la ley contra quien se convierta en transgresor”.
“La sociedad está ofendida, no puede ser posible que esté en riesgo la seguridad y que se hayan cerrado algunos planteles y comercios a consecuencia de que un grupo de personas haya amagado previamente con tomar el recinto sindical y capilla funeraria de la Sección 147”, opinó molesto García Farías.
Recordó el comerciante local que el 12 de mayo anterior, la comunidad monclovense vivió una de las páginas más negras de su historia reciente cuando una trifulca pandilleril entre fracciones rivales de la Sección 288 generó grave desorden social.
Dijo que en medios del caos se resalta públicamente la figura de Napoleón Gómez Urrutia, de quien dijo, “todos saben que jamás en su vida ha trabajado en la industria minera, nunca ha sido obrero”.
Raúl García, reprobó que cada vez que se perciben enfrentamientos entre grupos sindicales, se paraliza un sector de la ciudad con afectación a escolapios, amas de casa, comerciantes y peatones, y aunque haya daños, lesiones, y pandillerismo la autoridad nunca ha procedido contra quien o quienes resulten responsables.
“La molestia es que no nos dejan vivir en paz, los asuntos sindicales deben ser resueltos ante las autoridades competentes no con riñas callejeras, la autoridad debe ser drástica y fijarles un hasta aquí, nadie es detenido, todo esto es un mal ejemplo para las futuras generaciones”, abundó el comerciante.
Apuntó que aquel que transgrede la ley debe ser puesto tras las rejas, ya que no puede ser posible que la autoridad tenga que solapar los desmanes de una minoría, ya que el comercio tiene que vender, los niños tienen que estar en los salones de clase y la seguridad públicas garantizar el orden público,