Cientos de monclovenses se desplazaron a Espinazo que para quienes practican esta religión es Tierra Santa, para celebrar el nacimiento espiritual y fallecimiento del famoso curandero
Alberto Rojas Carrizales
LA PRENSA
ESPINAZO, NUEVO LEÓN-. Jolgorio, música, baile, rituales, enfermos desahuciados, vendimia, multitudes y réplica de métodos de sanación poco ortodoxos que aplicaba el Niño Fidencio, así celebró la Iglesia Fidencista Cristiana el 85 aniversario de lo que ellos llaman el nacimiento espiritual y fallecimiento del curandero.
Cientos de monclovenses se desplazaron el domingo a Espinazo que para los fidencistas es Tierra Santa, en su mayoría son creyentes de los milagros adjudicados hace casi 100 años al personaje quien murió el 19 de octubre de 1938 de causas naturales a la edad de 39 años.
Como anualmente sucede, devotos del centro del país y sur de Estados Unidos se congregaron en Espinazo, municipio de Mina, Nuevo León, en los límites con Coahuila, algunos desahuciados por la ciencia médica, otros sin IMSS ni recursos para la medicina privada. Llegan con esperanza de aliviar sus males, otros a agradecer a su santo el milagro de años atrás, la misma postal de cada año-
Oiga usted; cumbias, cualquier interpretación bailable con saxofón y tarolas a todo lo que da, principalmente el Pávido Návido, las “cajitas” o materias” con indumentaria de enfermeras, tela de seda, entrando en trance en sus oraciones con voz extremadamente aguda, así como José Fidencio Síntora Constantino.
Sordomudos son llevados por sus familias a mecerse en un columpio, así como lo hacía el personaje, quien también intentaba hacer que hablaran y escucharan encerrándolos en una jaula con una pantera desdentada, según cuenta los devotos.
El charquito de lodo bajo un pirul donde enfermos desesperados por el avance de sus padecimientos crónicos degenerativos se embarran todo el cuerpo, antes de abandonar el sitio llenan botellones. Largos relatos de creyentes que afirman que cuando los médicos ya los habían desahuciado, sanaron por milagro del Niño Fidencio después de visitar Espinazo.
En la casa donde vivía y murió José Fidencio Síntora Constantino, ahí sus descendientes conservan como reliquias de museo su mobiliario, a las 14:00 horas termina la verbena, entonces inicia la etapa de luto y misa.