Abogado de la empresa demandada, exhibe contrato en que dio cumplimiento a la entrega de una maquinaria con valor de 7 millones de pesos
Alexis Massieu
La prensa
Tras se acusado falsamente de un fraude por 11 millones de pesos cometido en el 2018, el día de ayer un juez penal, dictó en favor de Rafael Omar “N”, representante legal de una empresa duranguense de nombre Triaso, un auto de no vinculación a proceso, al demostrar mediante su abogado, que lo que se debe son 4 millones, y que no se trata de un delito, sino de un asunto de carácter mercantil.
Luego de ser denunciado por un fraude por obras incompletas de cuantía mayor, el día de ayer se llevó a cabo la audiencia inicial del proceso identificado como la causa penal 728/2022, en la cual, el imputado, pasó de ser un presunto defraudador, a ser la víctima de una calumnia maquinada en su contra, por el representante legal de la empresa Rentec.
Durante más de dos horas de debate entre el Ministerio Público, el representante legal de la empresa “ofendida”, y el abogado del imputado, se vertieron duros argumentos a favor y en contra, sin embargo, la prueba que echó abajo la acusación en contra de Rafael Omar, fue un contrato celebrado ante notario, en el que Rentec, recibía de Triaso, una maquinaria con valor de 7 millones de pesos, y se acordaba el pago del resto, mediante la disposición de otros equipos en favor de la empresa monclovense.
Según la acusación que realizó el Ministerio Público, todo comenzó a principios del año 2018, cuando la empresa Rentec, andaba en busca de alguien que pudiera suministrarles una planta de asfalto, y contactó con la gente de Triaso, celebrando un contrato por 11 millones de pesos el día 13 de noviembre del 2018.
A través de la financiera Ingenium Capital, y firmando un contrato de arrendamiento de una maquinaria que no existía, y mucho menos había sido entregada, se dispusieron a favor de Triaso, los 11 millones de pesos, sin embargo, al cumplirse los 56 días para la entrega e instalación de la referida planta, el contrato no había sido cumplido.
Fue ante ese retraso, que el 10 de octubre del 2019, casi un año después, en una visita al Estado de Durango, se firmó por parte de Triaso, un reconocimiento de adeudo ante notario, la cual solicitó 5 meses más para cumplir con lo acordado, destacándose en la denuncia, que en aquella ocasión, se les había mostrado a los de Rentec, una planta de asfalto que supuestamente era la suya, para justificar avances, lo cual no era cierto.
Hasta ahí, la acusación hecha en contra de Rafael Omar “N”, parecía ser lo suficientemente sólida para que se le dictara una vinculación a proceso, y se continuara con las investigaciones en su contra, sin embargo, durante su última participación, el abogado defensor, sacó a relucir un documento que llamó la atención del juez.
Se trataba de otro convenio celebrado ante notario, por los representantes legales de Rentec y Triaso, el día 3 de marzo del 2020, en el que, a manera de pago parcial, por 7 millones de pesos, se le entregó una planta similar a la que originalmente se había solicitado.
Respecto de los 4 millones de pesos que quedaron pendientes, en ese mismo convenio se generó un compromiso de que podrían cubrirse mediante la entrega de maquinaria o equipo que fuera del interés de Rentec.
Por esa razón, y pese a tratar de sorprender, o engañar al tribunal, el juez dictó un auto de no vinculación a proceso, por no corresponderse los hechos de la acusación, con la realidad, al grado de denunciar un fraude por 11 millones de pesos, cuando ya les habían entregado una planta con valor de 7.