Otros tantos se fueron a regiones dentro del territorio mexicano, para poder solventar los gastos familiares
Alberto Rojas Carrizales
En las estrategias por subsistir luego del colapso en Altos Hornos de México, dirigentes sindicales de las secciones 147, 288 y Comité Ejecutivo Nacional del Sindicato Democrático al igual que gran porcentaje del personal de confianza y sindicalizado, emigraron a diversas regiones donde actualmente trabajan, incluyendo ciudades texanas.
Además de dirigentes sindicales, y obreros también emigraron a Texas dos de tres ex funcionarios de la Sección 288 que desde el año 2020 enfrentaron acusaciones de administración fraudulenta por 7.4 millones de pesos, y que el 9 de julio anterior suscribieron un acuerdo reparatorio con la representación obrera para resarcir el daño pagadero en 2024.
“Se estima que entre un 40 por ciento y 50 por ciento del personal sindicalizado emigró a Ramos Arizpe, Monterrey, Piedras Negras, Acuña y ciudades texanas, algunos audaces ingresaron hasta el centro y extremo norte de Estados Unidos, argumentando que allá la mano de obra especializada está mejor cotizado con más dólares por hora laborada”, dijo una fuente.
“Es la lucha por la subsistencia, además aquí no hay plazas laborales disponibles, mucho menos sueldos atractivos, no quedó otra más que emigrar, ahorita acabo de retornar de San Antonio, Texas, pero me regreso, ya estamos contemplando emigrar las familias”, indicó un ex dirigente sindical de la Sección 288.
En muchos trabajadores soldadores, paileros, electricistas, tuberos o de ladrillo refractario donde en este último es del ramo de la construcción, el optimismo ya también se colapsó al grado que restan solamente vestigios. Consideran que a corto, ni mediano plazo habrá reapertura de la fuente laboral, y que al menos así terminará el año.