Oscar Ballesteros
La Prensa
Un festejo para rememorar a todos los pequeños que han sido violentados en sus derechos, incluso a la vida, es el significado más apegado a la historia bíblica del Día de los Santos Inocentes, más allá de las bromas que se realizan en el sentido popular es un recordatorio para proteger a todos los niños que son vulnerados por decisiones de adultos.
“De la liturgia se conocerá del profundo significado, recordamos a todos los pequeños que al igual que esos de la historia sufren peligro, vivimos en un mundo deshumanizado y cruel, desde el vientre se les priva de la vida, en México con el crimen organizado que corrompe y pervierte desde pequeños a muchos inocentes a caminos no propios de una infancia” expuso el presbítero Jorge Salvador Guzmán.
Durante el 28 de diciembre, de acuerdo a los relatos del Nuevo Testamento, el Rey Herodes mandó asesinar a todos los menores de 3 años de Belén por temor al nacimiento del Mecías que desequilibraría su mandato; cuestión que el párroco dijo, se asemeja a las malas prácticas establecidas por todos los adultos, en donde los niños se ven involucrados y generalmente dañados.
Este festeio es una invitación a reflexionar en cada uno de las acciones hechas por adultos, para dejar libres a los más pequeños con la posibilidad de una infancia digna y propia donde debería reinar la tranquilidad y alegría para los mismos, finalizó Jorge Salvador Guzmán.