En el marco de su noveno aniversario de ordenación como obispo, Hilario González García, puso como ejemplo de fortaleza a los habitantes de las regiones carbonífera y centro de Coahuila
Roberto Hernández
LA PRENSA
SALTILLO, COAHUILA. – Con la Catedral llena, los feligreses cantaron las mañanitas a Hilario González García para festejar el noveno aniversario de su ordenación como obispo, que se celebra este 22 de enero, así como el tercer año de su llegada a la Diócesis de Saltillo, que se cumplirá el 29 del mismo mes.
El obispo pidió a Dios por la reparación de los corazones de los saltillenses: “Ha sido la plenitud de vocación del sacerdocio la que me llamó el señor. Primero al diaconado, después presbiterado y hace 9 años a vivir como obispo, seis con la Diócesis de Linares, en Nuevo León, y tres con la de Saltillo”, dijo.
Añadió que trabajar en Saltillo en estos últimos 3 años ha resultado muy edificante, sobre todo al ver el entusiasmo y las ganas de ser de Dios, y el compromiso que se tiene en las comunidades.
Recordó que ha ido a 22 parroquias como visita pastoral oficial, donde ha encontrado apertura y hospitalidad, además del compromiso cristiano.
Es por ello que invitó a todas las personas a seguir desarrollando la vocación cristiana, pues recalcó que tanto laicos, sacerdotes, religiosos y sociedad civil han estado trabajando en la búsqueda de la justicia, la verdad y el reino de Dios.
El obispo agradeció y pidió apoyo con la oración para servir mejor, así como lo dice el lema de su episcopado: “Sirvamos al señor con alegría”.
La celebración de sus festejos se dio al término de la misa, donde se convocó y oró por la unidad de todos los cristianos, siendo el párroco de Catedral, Plácido Castro, quien agradeció a Dios por la vida y el servicio del obispo para luego convocar a cantar las mañanitas. Frente al altar se colocó un pastel con una vela.
NO DARSE POR VENCIDOS
González García apuntó que los saltillenses son muy intensos, pero que Dios provee de la restauración, descanso y convivencia con la gente, además de que ayuda a reparar el corazón, por lo que pidió no darse por vencidos en la búsqueda del bien.
“Invito a toda la comunidad, y en especial a los católicos creyentes, a no darnos por vencidos en la búsqueda del bien en esta generosidad y en esta ayuda mutua que es algo que caracteriza también a las personas de esta Diócesis”, indicó.
Puso de ejemplo a Monclova, donde a pesar de la situación, no se dan por vencidos, así como tampoco en los lugares donde se trabaja la minería. Con información del Diario de Coahuila.