Hoy Día de la Candelaria, en muchos hogares mexicanos levantan la figura del Niño Dios del pesebre-y en compañía del padrino o la madrina, lo visten.
Oscar Ballesteros
La Prensa
Un 100 por ciento es el incremento en las ventas del Niño Jesús y todos sus accesorios dentro de los comercios ubicados en el primer cuadro de la ciudad durante la víspera del festejo del día de La Candelaria; año tras año clientes acuden para renovar estos artículos con los cuales festejan el rito religioso de bendecir dicha figura con vestimentas y detalles muy ornamentados.
Los precios por el personaje varían de acuerdo con su tamaño y estilo, van desde 150 pesos el más pequeño, mientras que la figura más costosa llega a los 695 pesos, costo que algunos clientes sí deciden desembolsar en el cumplimiento de esta tradición religiosa; sumando aún a esta compra accesorios para el Niño Dios donde se encuentran los más tradicionales ropones e incluso su propia silla.
“Se aumenta un 100 por ciento, la gente es cuando lo levanta, se venden mucho más, la gente todos los años lo cambian, vienen por ropita diferente” explicó una encargada de estos negocios ubicados sobre las principales vías de la Zona Centro.
Para esta festividad se experimenta con diversos colores en las vestimentas, destacando rojo, celeste e incluso prendas con estampados en representación del mismo Niño Dios, pero con un estilo animado, sin embargo, es el clásico ropón blanco el que predomina en el mercado; esto a la par de su silla en combinación de dorado y rojo, frente algunas variantes de plateado.
Lo más clásico es siempre lo que representa un mayor movimiento económico, señaló la negociante, pues a pesar de que apenas un año anterior las familias hayan adquirido un producto similar, vuelven para renovar a su Niño Dios, así como todos los ornamentos que le corresponden.
