Dirigiéndose a la futura mamá, la cantante Pink le dijo: “¡Buena suerte! Todo irá bien. Será increíble”; por cierto no es la primera vez que pasa algo así.
Pink podría inducir un parto. O eso es lo que parece, después de que una fan entró en proceso de parto en un concierto en Australia el viernes 9 de febrero, y no fue la primera vez.
En la apertura de su gira australiana del ‘Summer Carnival Tour’ en Sídney, la cantautora interrumpió su actuación al percatarse de que una espectadora estaba en labor de parto. Inicialmente, Pink no había notado lo sucedido, a pesar de que los miembros de su equipo trataban de informarle tras bambalinas.
“¡Dios mío, ¿cómo he podido tardar tanto en notarlo?”, dijo Pink desde el escenario, palabras que fueron captadas en un video que un asistente compartió en TikTok. “¿Quién está a punto de llegar, Alicia o Alex? Creo que deberíamos darles algo de privacidad. ¡No miren!”
En ese momento, el bebé aún no había nacido, pero Pink, entre risas, expresó su asombro ante la idea de que su música pudiera inducir el parto. “Es emocionante”, afirmó. “Realmente no sé qué más decir. Sigamos cantando”.
Dirigiéndose a la futura madre, Pink le dijo: “¡Buena suerte! Todo irá bien. Será increíble”.
PARTOS EN CONCIERTOS DE PINK
No es la primera vez que una asistente a uno de los conciertos de Pink entra en trabajo de parto durante su actual gira, que arrancó en junio en Inglaterra y concluirá en noviembre en Florida.
Angela Mercer comenzó a sentir contracciones poco después de llegar al turno del tour en Boston el pasado agosto. Junto con su familia, se trasladó rápidamente al Brigham and Women’s Hospital. La mujer relató la experiencia en Facebook.
‘El fan más joven de Pink se llama Aycen Hart’, anunció el hospital posteriormente. “Aycen nació el mismo día del cumpleaños de su abuela Bárbara”.
SUMMER CARNIVAL TOUR, LA GIRA DE PINK
El Summer Carnival Tour comenzó el 7 de junio de 2023 en el University of Bolton Stadium en Bolton, Inglaterra, y finalizará el 23 de noviembre de 2024 en el LoanDepot Park en Miami, Estados Unidos.
Esta gira sirve como promoción de su noveno álbum de estudio, Trustfall (2023). La gira rompió récords de asistencia en todo el mundo, con más de 3 millones de entradas vendidas y unos ingresos brutos de $350 millones a través de fechas en Europa, el Reino Unido, América del Norte, y las próximas fechas en Australia y Nueva Zelanda.
