“En distintas ocasiones se ha tenido que cambiar el tinaco, las tuberías y cableado eléctrico, son obras que se detienen con mucho esfuerzo”, expresa al padre Jorge Salvador Guzmán
Oscar Ballesteros
La Prensa
La delincuencia ubicada dentro del sector Colinas de Santiago ha sido responsable en múltiples ocasiones de menguar los servicios del Comedor Comunitario de la parroquia Sagrada Familia; este centro de ayuda para los más necesitados se sustenta del apoyo de la comunidad y otras dependencias, por lo que cada caso de vandalismo afecta mucho a su funcionamiento.
El Padre Jorge Salvador Guzmán, párroco de la iglesia encargada de este comedor comentó que el contexto de este sector sí deja en una situación muy vulnerable a este centro, que con los propios recursos de los benefactores como lo es la colaboración de Cáritas Región Siderúrgica que se han tenido que reparar los desperfectos causados.
“En Colinas sí es un tema porque ante la situación del vandalismo en distintas ocasiones se ha tenido que cambiar el tinaco, las tuberías y cableado eléctrico, son obras que se detienen con mucho esfuerzo, pero a veces por la misma situación del contexto se ha tenido incluso que reponer estas partes del servicio que se da” declaró Salvador Guzmán.
Debido a esto, el párroco exhort{o a los propios vecinos del a comunidad aledaña a estar atentos con respecto a estas actividades delictivas dentro del comedor, para así seguir enfocando los recursos recaudados únicamente a servir en el bienestar principalmente de adultos mayores, enfermos y familias con hijos menores que no cuenten con sustento para alimentarlos.