Sin dinero para comprar alcohol, optan por sustraer pantallas, licuadoras, celulares u hornos de microondas
Alberto Rojas Carrizales
LA PRENSA
Sin dinero en los bolsillos los alcohólicos han llegado al extremo de sustraer bienes del hogar como pantallas, licuadoras, celulares, hornos de microondas, entre otros artículos para venderlos y obtener dinero para las botellas y otros vicios, aseguró Jorge “N” del organismo Alcohólicos Anónimos Sendero.
Añadió que las familias llegan ante “AA” a solicitar ayuda para los afectados los cuales no únicamente son varones, sino también féminas, calculó que aproximadamente un 20 por ciento es el incremento que registra la cantidad de alcohólicos que recurren en busca de ayuda a ese organismo, mientras que en otros casos son sus esposas, hijos y otros parientes.
Precisamente, agregó el entrevistado frente a este grave problema social, “de la sustracción de los bienes del hogar para venderlos y tener dinero para satisfacer el vicio, se produce el reclamo de las esposas e hijos, lo cual finalmente termina en violencia intrafamiliar que en muchos casos terminan ante las autoridades del Ministerio Público”.
Se ha agravado, ciertamente, continuó diciendo, “el caso de los problemas de violencia intrafamiliar por el saqueo de bienes, es por eso, que llegan familiares a pedir que les ayudemos, pero también los propios interesados cuando admiten que, de plano, ya no pueden ejercer un control de la bebida que ha dañado considerablemente su salud, economía y relación familiar”.
Entonces, manifestó más adelante el coordinador, del grupo “AA” enclavado en calle Allende casi esquina con Cuauhtémoc de la zona centro de Monclova, “la invitación está abierta para los interesados en recuperarse”. El entrevistado, señaló que tiene casi 20 años en sobriedad después de serios problemas que enfrentó a causa de la bebida.
Comunicó que las personas que acuden a solicitar ayuda a Alcohólicos Anónimos son de clase media baja hacia abajo tanto mujeres como varones, los cuales ahí son recibidos para la serie de conversaciones orientadas a la recuperación.
La sustracción de bienes del hogar produce el reclamo de esposas e hijos, lo cual finalmente termina en violencia intrafamiliar, señaló “AA Sendero”.