Por Excélsior
La Prensa
Siete personas, cinco hombres y dos mujeres, fueron ejecutadas durante la madrugada de este viernes en el municipio de Acultzingo, en Veracruz. Los hechos ocurrieron en la zona centro de la cabecera municipal.
Horas antes, pobladores de esa demarcación habían protestado y bloqueado la carretera debido al secuestro de Emmanuel Cid Villa, vocero del ayuntamiento, quien también funge como director de Fomento al Deporte. El pasado miércoles fue sacado violentamente de su negocio de papelería por un grupo armado.
La Fiscalía General del Estado confirmó el hallazgo de los siete cadáveres en la avenida La Presa e informó que ya iniciaron las investigaciones para dar con los responsables, sin embargo, no dio detalles sobre la identidad de las víctimas y si este hecho está relacionado con el secuestro del funcionario municipal.
En un audio subido a la cuenta de Facebook de la página SDR Acultzingo y sus Alrededores, el exalcalde de esa demarcación, Salomón Cid Villa, advirtió que se habían llevado a su sobrino e hizo responsable directo al alcalde Alfredo Cruz.
“Porque siempre se le ha solicitado seguridad y ha hecho caso omiso y es cómplice de la banda de delincuentes El Bukanas, lo hago directamente responsable a él”, dijo.
Desde la madrugada, elementos de la Guardia Nacional, Ejército y de la Policía Estatal mantienen sitiada la zona para evitar un nuevo hecho de violencia.
Pobladores de Acultzingo piden toque de queda
Dada la violencia y la irrupción de gente armada “aún en pleno día”, los pobladores de Acultzingo pidieron que se declare un toque de queda y que las autoridades mantengan sitiada la zona hasta que replieguen a los delincuentes. Señalaron que ya no hay tranquilidad ni seguridad en sus hogares.
“Ya lo vimos, llegaron, se metieron a sacar a Mencho (Emmanuel Cid) y ahora matan a la gente en sus patios, así ya no hay garantía”, reclamó uno de los entrevistados.
Pidieron además que la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Marina continúen a cargo de la seguridad den la zona, pues desconfían de la policía estatal y la Fuerza Civil.