La mancha solar AR3590 apunta casi directamente a la Tierra y, según los expertos, podrían estar dirigiendo ráfagas de radiación más potentes que podrían causar estragos en las redes eléctricas y las señales de navegación.
Una enorme macha solar que la semana pasada provocó la más fuerte tormenta geomagnética registrada en los últimos 7 años aún continúa provocando estragos, y es que recientemente científicos se percataron que ahora apunta directamente a la Tierra.
La mancha solar, llamada AR3590, no ha terminado de dirigir el violento clima espacial en dirección al planeta, tan solo la semana pasada, emitió tres erupciones solares, sin embargo, la del pasado 22 de febrero fue la mayor erupción solar registrada en seis años y medio.
Ahora, AR3590 apunta ahora casi directamente a la Tierra y, según los expertos, podrían estar dirigiendo ráfagas de radiación más potentes que podrían causar estragos en las redes eléctricas y las señales de navegación.
Además, suponen riesgos para las naves espaciales y los astronautas, aunque también podrían provocar hermosas auroras boreales.
El miércoles y jueves de la semana pasada, la mancha solar AR3590, hasta nueve veces más grande que la Tierra, lanzó tres poderosas erupciones descritas como de clase X, el tipo más grande que puede provocar apagones de radio en todo el mundo y tormentas de radiación en la atmósfera superior.
Con una magnitud de X6,3, es la erupción solar más poderosa en siete años, provocó apagones de radio durante horas.
De acuerdo con SpaceWeather.com, ahora que la mancha solar AR3590 apunta casi directamente al planeta, probablemente se experimente un «aumento de la actividad solar», por lo que los científicos se mantienen alerta de los eventos climáticos espaciales que impacten a la Tierra.
Se prevé que las tormentas geomagnéticas afecten las tecnologías en el planeta como las redes eléctricas, las comunicaciones, la navegación GPS, los viajes aéreos y los satélites.
