¿Hay insatisfacción en tu relación? Eso puede convertirse en un problema grave y, si no se atiende, incluso puede llegar a causar una ruptura, y es por eso que es importante estar atento a las señales y encontrar la manera de lidiar con la situación antes de que sea tarde.
Cuando hay insatisfacción, entonces la relación no es realmente feliz, el vínculo y la intimidad sufren e incluso puede pasar que la persona que sufre esto empiece a considerar seriamente el renunciar a todo. La insatisfacción también puede llegar a ser un factor de infidelidad o de malas prácticas como el Ghosting o el Benching, que en realidad no solucionan nada y solo causan más estrés, frustración y dolor.
Pero todo esto se puede prevenir o se puede trabajar para darle la vuelta a la situación, aunque para esto es necesario identificar la insatisfacción a tiempo. Hay señales que son muy claras de que algo no va tan bien, pero otras son un poco más sutiles o silenciosas, y solo se pueden identificar si estás atento y si sabes que son indicadores de un problema.
Todos queremos construir y tener relaciones felices, estables y duraderas, pero hay que entender que ninguna relación es perfecta y todas pueden tener malos momentos, pero eso no significa que separarse sea la única solución. Si la relación vale la pena, entonces hay que estar dispuestos a actuar y a no dejar de poner atención.
10 señales silenciosas de insatisfacción en tu relación
Berit Brogaard D.M.Sci., Ph.D, profesora de la Universidad de Miami, escribió en Psychology Today que es sumamente importante no ignorar los problemas y tampoco las señales, ya que esto puede hacer que todo vaya empeorando con el tiempo y que la relación termine destruida.
Brogaard indica que hay 10 señales que no son muy notorias al principio, pero que también son muy importantes y que pueden volverse más grandes si no se hace algo al respecto a tiempo.
- Comunicación reducida: la comunicación continúa, pero en menor grado o de manera distinta a lo normal. Lo que cambia es la frecuencia, la calidad o el interés que demuestra a otra persona.
- No hay iniciativa: la pareja no hace planes, no te busca, no inicia conversaciones o prefiere no tomar decisiones sobre la relación.
- Distancia emocional: tu pareja se muestra indiferente o distante.
- Cambia la intimidad física: ya no hay tanto contacto físico, hay menos sexo y pocas demostraciones de cariño y afecto.
- Aumentan los conflictos: hay más peleas y discusiones, o las cosas que antes no molestaban parecen causar problemas más grandes.
- Hay secretos: cuando tu pareja esconde cosas, no comparte mucha información sobre su día o lo que hace o incluso llega a mentir cuando le preguntas cosas.
- Pérdida de interés en metas compartidas: ya no se habla sobre los planes a futuro o siempre es la misma persona la que lo hace y la que demuestra interés, mientras la otra prefiere no tocar el tema o trabajar para conseguir esos objetivos.
- Se busca la validación por fuera: se busca atención y apoyo emocional en otras personas, pero no con la pareja.
- Cambiaron las prioridades: la relación ya no es lo más importante, el trabajo, los amigos y otros intereses comienzan a ser lo más importante y a consumir la mayor parte del tiempo.
- Evasión de planes a futuro: se deja de hablar sobre lo que sigue para la relación, los siguientes pasos o las acciones y planes que pueden ayudar a crecer y a avanzar en la relación.
“Prestar atención a los indicadores sutiles de que tu relación necesita renovarse puede ayudarte a abordar tus inquietudes de manera abierta y honesta antes de que sea demasiado tarde”, dice la experta.
Lo que pasa con estas señales es que no necesariamente indican que todo está perdido, pero si son un indicador muy claro de que hay problemas que están afectando la dinámica de pareja, y es importante trabajar en ello, buscando una mejor comunicación para entender de dónde viene esta insatisfacción y qué es lo que se puede hacer para solucionarla, en especial si hay interés por continuar con la pareja.