Con una historia de valentía que le permitió salir adelante con dos hijos, es capaz de combatir incendios y también desempeñarse como paramédico e instructora de la Academia Juvenil de Bomberos
Por Wendy Riojas
LA PRENSA
En la actualidad combatir incendios no es una tarea exclusiva para hombres, pues desde hace varios años las mujeres se han abierto camino en este oficio, erradicando la creencia de que no pueden realizar esta tarea por su género o condición física.
Un ejemplo de ello es Cintia Verónica Zabala Salazar quien desde hace varios años labora sofocando incendios, como paramédico y como instructora de la Academia Juvenil de la Estación de Bomberos.
Verónica es madre de 2 hijos, el mayor de 24 años hace su servicio social como licenciado en enfermería en el municipio de Cuatro Ciénegas y la menor de 22 años estudia la carrera de odontología en la Universidad de Durango.
Además de ser bombero-paramédico Verónica tiene un segundo trabajo en el área de seguridad en una empresa refresquera por lo que trata de disfrutar al máximo de sus 2 días de descanso para estar con su esposo y su familia.
Ella refiere que es originaria de Nueva Rosita, Coahuila, donde estudió como auxiliar de enfermería y que además formó parte de la primera generación de Técnico en Urgencias Médicas de Múzquiz.
Sin embargo, llegó a la Ciudad de Monclova, Coahuila, con sus 2 hijos pequeños, (luego de un divorcio), gracias a que una amiga le preguntó si quería trabajar y ella pertenecía al Cuerpo Heroico de Bomberos.
Cabe mencionar que con el paso del tiempo, la profesión de Bombero se ha diversificado, tanto en los aspectos técnicos como humanos, y que para ella, pertenecer activamente al cuerpo de bomberos no es sólo un trabajo, sino una pasión.
NO SE ACABA EL MUNDO
“No se acaba el mundo, tenemos que luchar y sacar adelante a nuestros hijos”, expresó Cintia Verónica Zabala Salazar, Bombero Paramédico del Cuerpo Heroico de Bomberos, dirigiéndose a las mujeres que se sienten tristes por estar solas.
Ella mencionó: “Quiero decirles a las mujeres que si se puede, que yo me divorcié muy joven, cuando mis hijos eran muy pequeños y salí adelante; he visto a mujeres que se separan con sus niños chiquitos y se cierran, piensan que ya no hay nada, que se les acaba el mundo y no es así”.
Ella mencionó que se siente orgullosa de sus hijos, ya que, gracias al apoyo de sus papás, (que la ayudaron a cuidarlos para que ella trabajara), van a lograr tener su carrera en enfermería y en odontología.
“Mijo en unos meses se gradúa como licenciado en enfermería y mi hija en algunos años en Odontología y me da mucho orgullo poder haber logrado darles el estudio, mi sueño es verlos casados, que formen una familia y estar junto a mi esposo”.
Verónica revela que conoció a su ahora esposo Ernesto Daniel Cruz en la estación de Bomberos, donde él se desempeña como Capitán, con quien tiene 10 años disfrutando de los hijos y una nieta.
Y añadió: “Yo siempre digo que tengo 5 hijos porque son 3 de él y 2 míos y tenemos una nieta, es lo más bonito, disfrutar a la niña. Pero, a él lo conocí aquí en Bomberos, de hecho, aquí me pidió matrimonio”.
A las mujeres que sufren alguna separación o divorcio les dice: “No se acaba el mundo, tenemos que salir y luchar por nuestros hijos, siempre hay una luz, Dios nunca nos abandona y ahorita hay muchas oportunidades para las mujeres”.