Un grupo de católicos oraban bajo una techumbre cuando la granizada comenzó y ya no pudieron más que protegerse con las sillas
Karla Cortez / La Prensa
SABINAS, COAHUILA.- Un grupo de fieles católicas vivieron momentos de miedo, pero su fe fue más fuerte, ya que lograron salir sin golpe alguno, al estar orando durante la misa que se celebraba precisamente en ese momento en el que la tormenta azotaba la ciudad.
Y es que la misa se realizaba en una techumbre, como parte de las actividades de cuaresma, sin embargo el momento más difícil fue cuando empezó a caer el granizo, algunas de ellas acompañadas de niños lograron cubrirse la cabeza con las sillas en donde estaban sentadas, algunas otras siguieron orando, pidiendo por el momento.
El padre Rogelio Hidalgo Alba párroco de la Iglesia de San Martín, es quien precisamente ofrecía la misa en ese instante y quien señaló que en ese preciso momento en el que ocurría la caída de granizo Dios les cuidó y pese a lo que sucedía a su alrededor ellos seguían cantándole al creador.
A raíz de la situación tuvieron que suspender la misa de 7 en la iglesia de San Martin, ya que hubo daños materiales, sin embargo, afortunadamente , todas las personas que ahí salieron ilesos del momento tan crítico, solo se llevaron el susto de sus vidas.
Hidalgo Alba señaló que la fe de que todo estaría bien, permitió a muchos de los presentes en la misa pudieran mantener la calma.
