Tan tradicional como la uva es la nuez en Parras, que incontables familias locales cultivan, cosechan, pelan, preparan en dulces y, obviamente lo consumen
Especial
La Prensa
Aunque se vende en estado natural (pelada y sin pelar, a granel y empaquetada) es más fácil encontrarla transformada en distintos tipos de dulces, que abarcan diversas combinaciones con leche quemada, azúcar, caramelo, miel, higo, chabacano, durazno, guayaba e higo: bolitas, glorias, glorias rellenas, rollitos, palanquetas, noras, marquetas… hace falta un curso para conocer las variedades disponibles.
Otra golosina clásica de Parras es la campechana, que es en realidad un producto moderno, aunque no menos recomendable. La campechana de Parras suele ser más pequeña que la de otras partes del país y mucho más delgada, de modo que resulta exquisita.
Dulces de nuez, campechanas y otros comestibles artesanales como tamarindos preparados, mermeladas y cajetas se venden en incontables tiendas del pueblo.
En cuanto a guisos, el cerdo es el rey. El asado de puerco, los tamales de carne de puerco y los chorizos son magníficos. Pero hay también otros platillos formidables como los tacos de cabeza y la barbacoa de lengua de res. Encontrarás también restaurantes establecidos donde por lo general sirven comida más convencional (nacional, del noreste o internacional), pero de muy buen sabor.