Trabajadores ven signos positivos para la reapertura de la acerera. Venta de bienes no esenciales que será una bocanada de oxígeno
Alberto Rojas Carrizales
LA PRENSA
La estampida de optimismo está vigente, los trabajadores le apuestan a la reapertura de AHMSA donde la chispa que movería los primeros engranes es la evacuación de activos en desuso no fundamentales. El juez del Concurso Mercantil tiene un calendario y los dueños del dinero refrendan el plan de capitalización.
Monclova sabe que una eventual quiebra de AHMSA implicaría la bancarrota de esperanzas, un quebranto emocional que agravaría en diversos casos la disfunción familiar ya lastimada con llanto donde cada gota es una historia distinta. La ciudad exige que la siderúrgica sea otra vez el corazón bombeando circulante como torrente sanguíneo dispersado en todos los sectores.
Sentimos escalofrío, dice personal de escasa y larga antigüedad, – que AHMSA sea otra postal en Monclova como los vestigios de la Cooperativa Obreros Unidos, Cine Diana, Merco Carranza, entre otras ruinas, pero eso no sucederá”. ¿Cuál sería nuestra rendición de cuentas a las futuras generaciones si ocurre?, cuestionan molestos por el trasiego de oscuros intereses opuestos.
Francisco Ríos, líder de la Sección 288 del Sindicato Democrático, aseguró que la venta de bienes no esenciales que será una bocanada de oxígeno, empezaría a promoverse desde este 8 de abril porque la decisión ya está tomada por los trabajadores.
Sin embargo, falta otra aduana; los acreedores comunes ya se organizaron para impugnar la propuesta de convenio concursal consistente en una quita de 94 por ciento a los acreedores comunes, 5 por ciento pagadero a 17 años y 1 por ciento liquidado tras la celebración de la firma del proyecto, pero se estima que con la quiebra enfrentarían peor escenario.
Un analista especialista en el tema, asegura que tomando en cuenta los adeudos que tiene AHMSA registrados con sus trabajadores, los créditos con garantía real, los créditos fiscales, entre otros, se pronostica un escenario catastrófico para los acreedores comunes, pues difícilmente podrá alcanzar el dinero obtenido por la venta de activos para liquidar sus créditos.
Los grupos financieros inversores en Altos Hornos de México se mantienen firmes, le apuestan a Monclova y a sus trabajadores, pero si la prudencia se atora, podrían recoger sus fichas y retirarse de la mesa de juego, eso sería catastrófico, se perdería la única oportunidad de que el Ave Fénix extendiera sus alas para retomar el vuelo.
¿Cuál es la dinámica para salir del Concurso Mercantil?, se le preguntó al abogado experto en el tema y respondió; -una vez que AHMSA ha presentado la propuesta de convenio ante sus acreedores, éstos tienen la posibilidad de adherirse al mismo y de esta forma, evitar la quiebra de la empresa-
-Para el caso de que AHMSA logre obtener la aprobación del convenio concursal, el Juez Segundo de Concursos Mercantiles con residencia en la Ciudad de México aprobará el convenio así AHMSA, reanudará sus operaciones con la consecuente reactivación comercial con sus proveedores y de esta manera, se reactivan empleos y la cadena productiva de toda la región-.
Sin embargo, advirtió, -para el caso de que AHMSA no obtenga la aprobación de sus acreedores reconocidos que representen más del 50 por ciento del monto total de los créditos reconocidos, el Juez Concursal declarará la quiebra y en esta etapa, el conciliador procederá a la enajenación de los bienes y derechos que integran la empresa-
Con el producto obtenido de la venta de bienes y derechos de Altos Hornos de México, añadió el entrevistado especialista en el tema la ley de Concursos Mercantiles establece el pago a los acreedores reconocidos en el siguiente orden;
1.- Los créditos laborales de los cerca de 18 mil trabajadores. 2.- Los créditos autorizados por el conciliador para la administración de la empresa y/o los créditos indispensables para mantener la operación ordinaria de la empresa y la liquidez necesaria durante la tramitación del Concurso Mercantil.
3.-Los créditos contraídos para atender los gastos normales para la seguridad de los bienes de la empresa, su refacción, conservación y administración. 4.- Los créditos de los acreedores singularmente privilegiados; 5.- Los créditos de los acreedores con garantía real. 6.- Los créditos de los acreedores con privilegio especial; 7.- Los créditos de los acreedores comunes, 8.- Los créditos de los acreedores subordinados.
Se debe considerar que el valor de remate o venta de la empresa, se verá afectado y disminuido por diferentes factores; entre ellos: (i) el deterioro que han sufrido los activos durante el Concurso Mercantil, (ii) los robos y saqueos que sabemos han tenido lugar en las instalaciones de AHMSA, (iii) la dificultad de control físico y fáctico de los activos, entre muchos otros.
Adicionalmente, continuó diciendo, debe considerarse que en el caso particular de AHMSA, la mayoría de sus activos han sido otorgados en garantía a alguno de sus acreedores reconocidos con garantía real.
Ante el riesgo de quedarse sin pago de sus créditos y sin oportunidad de trabajar como proveedor para recuperar a futuro su capital, por esta razón, muchos acreedores comunes se han acercado con el Conciliador y AHMSA, manifestando su interés en adherirse al Convenio planteado y de esta manera, reactivar su relación comercial con la empresa y asegurar la continuidad de sus negocios.
Esos acreedores al igual que trabajadores no quieren desenterrar la historia regiomontana de 1986 y sufrir la reedición del cierre de Fundidora de Monterrey y Aceros Planos donde el personal al agotar el finiquito, deambulaba por áreas aledañas de lo que fue un complejo siderúrgico con el cerebro repleto únicamente de historias, añoranzas y recuerdos.
Los trabajadores lo que desean es que cierre la cicatriz de 15 meses y medio de severa crisis, angustia, miedo y lágrimas donde cada gota es una historia distinta, no desean se apague la flama del proyecto de reactivación por el trasiego de oscuros intereses.