Se trataba de una cascabel, por fortuna el hombre acudió a tiempo al hospital
Karla Cortez / La Prensa
SAN JUAN DE SABINAS, COAHUILA.- Gracias a que acudió a recibir atención médica muy a tiempo Arturo Flores Castillo, ejidatario de este municipio, se salvó de morir tras sufrir la mordedura de una víbora de cascabel.
El director del Hospital General de Nueva Rosita, Juan Arturo Montemayor Menchaca, explicó que el día lunes por la tarde recibieron a una persona de 64 años de edad, proveniente del ejido Santa Isabel, quien ingresó por mordedura de serpiente.
Esta persona presentaba la herida en la pierna, al animal lo presentó sin vida, es por ello que los médicos confirmaron de que se trataba de una víbora de cascabel.
El médico señaló que la atención que se le dio a esta persona fue muy oportuna.
Dijo que todo salió muy bien, el paciente no requirió quedarse hospitalizado, fue enviado a su casa gracias a que la atención se dio rápido y tuvo mejoría.
Esta persona indicó a los médicos que hace 26 años sufrió otra mordedura y le habían aplicado el antídoto correspondiente.
«Es una persona del rancho, ya sabe que es un ataque de este tipo de animal y llegó muy a tiempo ya que en ocasiones no se cuenta con ese tipo de sueros, pero por fortuna se tenía a la mano, todo fue rápido y esto ayudó a que esta persona no tuviera consecuencias», explicó.
Refirió que este tipo de mordeduras, si no se atienden a tiempo, empieza a destruir el tejido, con efecto de necrosis y a nivel sistémico tiene efecto sobre el sistema nervioso central.