Por Latinus
La Prensa
El presidente Andrés Manuel López Obrador, de visita ayer en Campeche para iniciar un recorrido en el Tren Maya, fue interceptado por policías estatales que buscaban entregarle una solicitud para una audiencia para darle a conocer su versión de cómo ocurrió el motín en el penal de Kobén, en el que varios elementos fueron agredidos física y sexualmente por los reos.
Durante la visita al estado del mandatario federal, un grupo de policías se acercaron al convoy en el que viajaba, pero sólo uno de los vehículos se detuvo.
En entrevista con medios, uno de los agentes informó que el documento menciona el operativo realizado en el penal el pasado 15 de marzo, pero también buscan hablar brevemente con el mandatario para informarle cuál es la situación de la corporación en el estado y que no tenga sólo la versión de la gobernadora Layda Sansores.
“Nosotros pensamos que fue a decirle todo a modo”, mencionó.
Los policías de Campeche se presentaron el pasado 24 de abril en la Cámara de Diputados para denunciar la criminalización y persecución que están viviendo en la entidad por parte de las autoridades estatales.
Desde lo ocurrido, en el operativo en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de San Francisco Kobén los agentes iniciaron manifestaciones y paro de labores por las malas condiciones labores y para exigir la destitución de la titular de la Secretaría de Seguridad de Campeche ante las violaciones a sus derechos humanos y por poner en riesgo la integridad de los uniformados.