Hoy, con un profundo pesar, quiero compartir la triste noticia del fallecimiento de mi señora madre, Lilia de la Fuente Ruiz. Mi madre fue una mujer incansable en la lucha por los derechos humanos, especialmente en la defensa de los derechos de las mujeres y las niñas. Su vida fue un testimonio de valentía y compromiso, dedicando cada día a hacer del mundo un lugar más justo y equitativo.
Desde muy joven, Lilia demostró su talento y pasión por las artes. Compositora y poeta, sus obras reflejaban su profundo amor por la justicia y su deseo de proteger y elevar a las mujeres. Sus poesías y canciones eran un grito de esperanza y una llamada a la acción.
Lilia también fue una ferviente promotora de su tierra, el Estado de Coahuila. En su amor por su región, compuso un canto para cada uno de los 38 municipios de Coahuila. Ella visitó cada municipio, se sentó en sus jardines y capturó la esencia de cada pueblo para poder cantarlo y ofrecérselo al mundo. Sus cantos fueron grabados con voces oriundas de nuestro Coahuila. Entre sus obras más destacadas se encuentra un hermoso canto sobre el Estado de Coahuila que habla de todos sus pueblos y de sus costumbres.
Además, Doña Lilia fue pionera en el ámbito de la radiodifusión de Frecuencia Modulada en el país. Fue una de las primeras mujeres locutoras en México y una empresaria visionaria en este campo. Junto con su esposo Melchor Sánchez Dovalina, trajeron la radiodifusión de FM al estado Coahuilense en 1966. Ella no solo fue locutora, sino también productora de comerciales, escribiendo los anuncios de la radiodifusora que operaban juntos.
Fue una extraordinaria madre de 4 hijos: Irasema, Martha, Melchor y Liliana, quienes la vamos a extrañar por siempre.
Como escritora y periodista, Lilia nunca dejó de trabajar, incluso hasta el último día de su vida. Su columna periodística abordaba temas políticos, sociales y familiares, siempre con un enfoque en los valores y la integridad. A través de sus palabras, inspiró a muchos y dejó una huella imborrable en quienes la leyeron.
Doña Lilia, como muchos la conocían, fue una revolucionaria en todos los sentidos. Su legado de lucha y amor perdurará en todos aquellos que tuvieron el honor de conocerla y en las generaciones futuras que seguirán sus pasos.
Hoy, rendimos homenaje a una mujer extraordinaria. Su vida y su obra continuarán siendo una fuente de inspiración para todos nosotros.
Melchor Sánchez de la Fuente
Presidente del Consejo de MS Comunicaciones