Era una docente excepcional, cuando algún alumno tenía un problema de conducta o rendimiento escolar, buscaba la solución de raíz, desde la familia del menor, expresa la Directora del Centro de Estudios Juan Larios
Por Wendy Riojas
LA PRENSA
“La maestra Lucy López cambio la vida de muchas familias. Era una mujer que apapachaba, que daba consejos y entrañablemente humana”, dijo la actual directora Académica del Centro de Estudios Juan Larios, Monserrat Díaz.
Esto tras el lamentable fallecimiento de la Directora General de la institución, quien dedicó gran parte de su vida a impulsar la educación y ayudar a niños, adolescentes y mujeres en situación vulnerable.
En la entrevista señaló que, si algún alumno tenía un problema de aprendizaje o de conducta, la maestra Lucy López se preguntaba ¿Qué está pasando con la familia?, ¿Cuál es la situación que está viviendo? En lugar de pensar en la sanción.
Incluso señala que llegó a salvar matrimonios, familias, incluso a jóvenes que llegaban con alto nivel de drogadicción o intentos de suicidio: “ella los sacaba adelante y los atendía a las 2 o 3 de la mañana, cambió la vida de muchas familias”.
La directora recordó cuando hace 9 años salvó el Centro de Estudios Juan Larios al formar una asociación con representantes de la iniciativa privada y la docencia, impartiendo clases debajo de los árboles.
“Hace 9 años la escuela cerró a mitad de ciclo escolar y ella formó una Asociación con personalidades de Monclova, tanto empresarios como personas de la docencia y lograron dar clases-al principio debajo de los árboles”.
Esto, luego de que la intención de la maestra Lucy López era que todos los niños y adolescentes tuvieran la oportunidad de estudiar independientemente de su condición social, económica o problemas familiares.
Actualmente señaló que la escuela es reconocida por aceptar jóvenes con asperger, autismo, síndrome de Down, a quienes les dan trato digno, ya que, los enseñan a convivir respetuosamente en esa diversidad.
Mencionó que es el legado que deja la maestra, quien era la directora general y quien siempre estuvo gestionando por el crecimiento del Centro de Estudios y así favorecer a las familias.
Por último, mencionó: “Sin duda es una pérdida muy grande no nadamás para el Colegio sino para toda la comunidad cultural, educativa. Ella estaba en una red de Fomento a la Lectura, una mujer que deja la vara muy alta”.