El presidente estadunidense hizo caso a las personas que pedían su renuncia tras el debate contra Donald Trump.
Joe Biden, presidente de Estados Unidos, tiró la toalla en su carrera por la reelección contra Donald Trump, luego de que éste lo rebasó durante el primer debate de la campaña .
Así lo dio a conocer el propio mandatario en una carta abierta publicada en su perfil de X, donde redactó «ha sido el mayor honor de mi vida servir como su presidente, y aunque mi intención era competir por la reelección creo que lo mejor para los intereses de mi partido y mi nación es dar un paso a un lado».
«Por ahora, expreso mi profunda gratitud a todos aquellos que colaboraron con mi campaña de reelección. Agradezco a la vicepresidenta Kamala Harris por ser una extraordinaria compañera», abundó el presidente.
Además, el jefe de Estado prometió dar más detalles «en esta semana» para explicar el porqué de su decisión, que ya era pedida por varios miembros eminentes del Partido Demócrata.
Biden ha cedido así a las presiones de su propio partido después de su mediocre actuación en el primer debate de la carrera a la Casa Blanca contra el ex presidente y candidato republicano Donald Trump.
El presidente, que está aislado en su domicilio de Delaware recuperándose del covid-19, explicó que en los próximos días se dirigirá a la nación para explicar su decisión.
«Y permítanme expresar mi más sincero agradecimiento al pueblo estadunidense por la fe y la confianza que han depositado en mí», afirmó Biden.
Partido Demócrata pedía su salida
El 72 por ciento de los votantes registrados en Estados Unidos dijo que el presidente no debería postularse para la reelección, según una encuesta elaborada por el medio CBS News y la firma YouGov realizada después del debate del jueves.
Lo que se traduce en un aumento de 9 puntos en comparación con la misma pregunta en febrero.
Biden, de 81 años, ha visto su candidatura debilitada como aspirante demócrata a los comicios de noviembre tras el debate contra el ex presidente Donald Trump en el que se mostró torpemente y por momentos titubeante, incoherente y sin acabar alguna frase .
Un sondeo de la CNN , la cadena encargada del primer debate entre los aspirantes a las presidenciales de noviembre, indicó el jueves que los registrados registrados que vieron el encuentro «piensan en gran medida que Trump superó a Biden»,
«La mayoría dice que no tiene confianza real en la capacidad de Biden para liderar el país. Al mismo tiempo, la mayoría de los que sintonizaron el programa dicen que tuvo poco o ningún efecto en su elección para presidente», indicó el canal.
¿Quién tomará el lugar de Joe Biden?
Kamala Harris, una opción obvia con poca popularidad
Harris sería la opción más obvia no solo porque ocupa la Vicepresidencia, sino porque como primera mujer y primera afroamericana en llegar a ese cargo apelaría directamente a dos grupos electorales clave para los demócratas: los afroamericanos y las mujeres.
Tiene, además, la ventaja de la edad: con 59 años , no generaría las mismas inquietudes en el electorado que Biden, de 81 años, y marcaría un claro contraste con Trump, de 78, y quien divaga habitualmente en sus largos mítines conectando frases sin sentido y difundiendo información falsa.
Gavin Newsom, el nombre en boca de todos
Su nombre es quizás el que más ha sonado como posible sustituto de Biden, incluso más que el de Harris. Newsom, de 56 años , es una de las caras más frescas del Partido Demócrata: su popularidad en los medios de comunicación, redes sociales y su gobierno progresista lo han convertido en una opción ideal .
Además, ha hecho grandes esfuerzos para aumentar su perfil en todo Estados Unidos. El año pasado creó un comité de acción política llamado ‘Campaña por la Democracia’ con el objetivo de apoyar a los demócratas en los estados más conservadores del país, algo que ha sido percibido como base para una futura campaña presidencial .
Gretchen Whitmer, una estrella en ascenso
Otra alternativa que ha cobrado fuerza es la gobernadora de Michigan , Gretchen Whitmer, una estrella en ascenso dentro del Partido Demócrata.
La gobernadora ganó perfil nacional durante la pandemia cuando se convirtió en uno de los blancos favoritos de Trump por las medidas que adoptó para evitar la expansión de la covid-19. El ex presidente la apodaba específicamente «esa mujer de Michigan», mote que ella, hábil comunicadora, ha sabido aprovechar para definir su imagen pública.
POR: MILENIO