Por El País
La Prensa
La anunciada visita a México del presidente argentino, Javier Milei, para participar en una cumbre de la ultraderecha ha tensado la relación con el presidente mexicano, el izquierdista Andrés Manuel López Obrador. Milei tiene previsto participar en un foro de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC, por sus siglas en inglés) el 24 de agosto en Ciudad de México. Los organizadores del evento y el Gobierno argentino confirmaron esta semana la asistencia del mandatario, una reconocida voz del ultraderechismo global. Milei clausurará el evento con “un firme mensaje sobre la imperiosa necesidad de seguir luchando por la libertad en América Latina y el mundo”, según un comunicado de la CPAC. Este martes, López Obrador ha dicho que Milei, como cualquier persona, tiene la libertad de visitar México para atender cualquier agenda, pero ha rechazado reunirse con él por diferencias de carácter político. “No coincido con su manera de pensar y su forma de ser”, ha dicho el mandatario mexicano.
Es la segunda vez que Milei visitará México para atender una cumbre de la CPAC, que reúne a líderes conservadores y ultraderechistas de todo el mundo (la primera vez, en 2022, aún no era presidente de Argentina). En México, el líder más reconocido de la conferencia es el político y otrora actor de telenovelas Eduardo Verástegui, que en las pasadas elecciones presidenciales intentó, sin éxito, convertirse en candidato independiente enarbolando el código ultra. El comunicado de la CPAC destaca el “estilo directo y compromiso con los valores libertarios” del presidente de Argentina. “Milei abordará la importancia de la defensa inquebrantable de los derechos individuales, la reducción del tamaño del Estado y la promoción de un sistema económico basado en la libertad de mercado”, asienta. “Se espera que enfatice una vez más la línea central de su pensamiento: la lucha por la libertad no es una opción sino una obligación para todos aquellos que aspiran a un futuro de prosperidad y desarrollo”, añade el texto.
López Obrador ha reconocido el derecho de reunión del foro ultra y la presencia de líderes conservadores en México. “Es algo normal, en nuestro país hay libertades, puede venir cualquier persona: presidente, dirigente de oposición, representante de los bloques de derecha que hay en el mundo”, ha dicho. “Este es un país libre, no hay censura, no hay persecución, hay libertades plenas. No hay ningún problema”. Sobre la nueva visita de su homólogo argentino, López Obrador ha precisado: “Él es libre, y una cosa es el Gobierno de México y otra cosa es el pueblo de México, y nuestro pueblo siempre ha sido muy hospitalario, fraterno y respetuoso”. La relación entre Milei y López Obrador atraviesa un momento de tensión, que hasta ahora se ha mantenido en el nivel de las descalificaciones verbales, sin llegar a lastimar los lazos diplomáticos. Mientras el argentino calificó a su homólogo mexicano de “ignorante” en una entrevista, López Obrador dijo que no comprendía cómo los ciudadanos argentinos habían votado a un político que “desprecia al pueblo”.