Crece la preocupación de los habitantes de Manantiales del Valle por el deceso de animales por intoxicación, culpan a “El Brujo”
Por: Roberto Hernández
LA PRENSA
RAMOS ARIZPE, COAHUILA. – La comunidad del sector Manantiales del Valle ha sido sacudida por la muerte de al menos diez animales, entre perros, gatos y pájaros, presuntamente envenenados por un individuo conocido como «El Brujo». Este sujeto, según testimonios de los vecinos, ha estado esparciendo comida envenenada en la calle Lago Maracaibo, generando una ola de indignación y miedo en la localidad.
Los residentes de la cuadra, que cruza con la arteria de Los Arroyos, decidieron unirse ante la macabra situación y reportaron los hechos a las autoridades. Crescencio Nájera y María de la Luz Figueroa, vecinos afectados, presentaron su denuncia ante el departamento de Atención Ciudadana Municipal, exigiendo una intervención inmediata para detener al envenenador de al menos diez mascotas.
En respuesta a la denuncia, al lugar acudieron agentes de la Policía Preventiva Municipal, elementos de Protección Civil y una representante del centro de bienestar animal Mi Mascota. Estos funcionarios confirmaron la gravedad de la situación y recogieron pruebas proporcionadas por los vecinos, quienes entregaron videos donde se observa a una persona esparciendo comida sospechosa en las banquetas.
A pesar de no haber localizado al presunto responsable, la representante del Centro Mi Mascota recolectó un rollo de comida envenenada, el cual será analizado en laboratorio para identificar el tipo de tóxico empleado. Además, se llevaron los cuerpos de un perro y un gato, que aparentemente murieron tras ingerir la sustancia, para confirmar si la causa de muerte está relacionada con el veneno encontrado.
De comprobarse la responsabilidad del sujeto apodado «El Brujo», las autoridades podrían proceder con una denuncia penal en su contra. El Código Penal del Estado de Coahuila establece en su capítulo quinto, artículo 293 BIS 1, que cualquier persona que cometa actos de maltrato o crueldad injustificada contra animales no considerados plaga puede enfrentar penas de seis meses a cuatro años de prisión, además de una multa de 100 a 500 días de salario mínimo. En caso de que el maltrato resulte en la muerte del animal, las penas aumentan de dos a seis años de cárcel y de 300 a 1,000 días de multa, según el artículo 293 BIS 2 del mismo capítulo.