Mientras que sus ahora exempleados acusan a supervisores de priorizar cantidad sobre calidad, quienes conservaron su puesto, desempeñan sus labores en un clima de incertidumbre
Alberto Rojas Carrizales
LA PRENSA
Después del despido masivo de 450 a 500 trabajadores aplicado por la compañía –APTIV- la incertidumbre prevalece entre el resto del personal porque nadie les informa si acaso subsistirá o desaparecerá la fuente de empleo, además cada vez es más intensa la versión de que trabajos mal hechos por culpa de jefes, provocaron la pérdida de clientes.
“El problema no es falta de mercado, sino deficiencias, a los supervisores les preocupó más la cantidad que la calidad, de nada sirve una producción de 300 arneses, si solamente pocas salen buenas porque van mal encintadas, con ramales cortos, cables reventados, si APTIV está así es por culpa de todos”, expresaron ex empleados y ex trabajadores.
“APTIV abrió la puerta a muchos, no solo eso, generó empleo con buen sueldo y buenas prestaciones, pero tuvo gente como jefes con puesto de confianza que no está preparada para lidiar con el personal como supervisores, además les interesa solamente la meta de producción, pero con fallas”, abundaron los cibernautas.
Trascendió además que hay riesgo de que durante el transcurso de esta semana continuarían los programas de recortes de personal, pero sin ser oficial porque la empresa APTIV aplica la baja sin notificar previamente.
Por otro lado, diversos trabajadores señalaron que el cheque expedido por la empresa APTIV amparando el importe del finiquito para ser cobrado en un conocido banco, solamente en algunas sucursales lo estaban cambiando porque en otras les decían que no había recursos disponibles por parte de la compañía.
“No existe ningún problema, la mayoría ya lo hizo efectivo, el depósito de los finiquitos lo están haciendo periódicamente, otros lo cobraron desde la semana anterior inmediatamente a partir de la baja, mucha gente ya empezó a entregar solicitudes en otras compañías similares como Alphabet, otros hasta vacaciones están disfrutando”, agregaron- “El problema no es falta de mercado, sino deficiencias, a los supervisores les preocupó más la cantidad que la calidad”, aseguran trabajadores respecto a APTIV.