Una experiencia terrorífica en que su vida estuvo en peligro, pasó una mujer, víctima de la violencia de José Luis “N”; antes le había dado un puñetazo en el rostro
Alexis Massieu
La Prensa
Tras ser acusado por el delito de violencia familiar y la privación de la libertad de la mujer con la que vivió durante un año en unión libre, en el municipio de Castaños, el día de ayer, arrancó el proceso penal en contra de José Luis “N”, quien presuntamente, y con motivo de los celos, se llevó a la víctima por la fuerza hasta la laguna de aguas negras conocida como “El Paredón”, donde le dijo que la iba a matar.
Fue en la sala uno del Centro de Justicia Penal, donde se llevó a cabo la audiencia inicial relativa a la causa 201/2024, en donde la abogada del Centro de Justicia y Empoderamiento de la Mujer (CJEM), señaló: que de acuerdo a las investigaciones, todo comenzó el sábado 13 de julio por la noche, cuando José Luis y María, se encontraban en una fiesta en la colonia California, y al salir de ahí, comenzaron a discutir mientras se dirigían a su casa.
Fue al pasar por las vías del ferrocarril, que José Luis, quien iba al volante, le quitó a la afectada su bolso y su teléfono celular, y viró cambiando de dirección, y cuando ella le preguntó hacia dónde la llevaba, él le respondió que se callara, y le dio un puñetazo en la cara.
La afectada narró en su denuncia, que la llevó hasta el domicilio de un amigo, al que le pidió prestada una camioneta, y que cuando se detuvo, ella se bajó del carro, y en el forcejeo, con un pedazo del retrovisor le cortó un dedo, subiéndola luego por la fuerza a la vagoneta que le prestaron, y fue entonces que le empezó a decir que la iba a matar y a tirar en el Paredón.
Cuando llegaron al estanque de aguas negras, eran ya entre las 4 y 5 de la mañana, ya que la víctima vio que ya empezaba a clarear, y entonces la bajó de la camioneta, y como ya lo había hecho antes comenzó a estrangularla mientras le decía que ahí la iba a tirar, siendo que en dado momento la creyó muerta y la soltó, y cuando ella reaccionó, le pidió que se la llevara de ahí, asegurándole que no le iba a contar a nadie lo que pasó.
Él tomó el volante de nuevo y condujo hacia la colonia Libertad, pero al aproximarse a su casa, en la calle Privada Medina, no se detuvo, y al ver que continuaba su marcha, ella abrió la puerta y saltó de la vagoneta, siendo auxiliada por un vecino que le prestó su teléfono para que le pudiera llamar a su mamá, y de ahí acudir en busca de ayuda a donde estaba un operativo de la Policía sobre la carretera 57.
Entre las pruebas presentadas en contra del acusado, se indicó que se contaba con un dictamen médico de lesiones, la entrevista con el dueño de la vagoneta que pidió prestada, quien confirmó la hora, e incluso dijo que José Luis “N”, le dio como pretexto que era para llevar a su pareja a consultar porque se había cortado un dedo.
Por recomendación del abogado defensor, el acusado hizo valer su derecho a no declarar, y solicitó el plazo constitucional de 144 horas para preparar su defensa, razón por la que la audiencia inicial se suspendió y se reanudará el próximo 5 de noviembre a las 12:30 horas.
El acusado, cabe señalar, podrá seguir con su proceso en libertad, con la única obligación de no comunicarse ni acercarse a la víctima y a los testigos, y acudir a la Unidad de Medidas Cautelares a realizar firmas periódicas.
Al respecto, el juez penal a cargo del caso, señaló no estar de acuerdo con la medida cautelar que se le solicitó, sin embargo, recordó a los presentes, la facultad de solicitar la medida cautelar de la prisión preventiva justificada, es exclusiva del Ministerio Público, acentuando la responsabilidad en la que podrían incurrir las autoridades en caso de que ocurriera un feminicidio por no adoptar las medidas necesarias para proteger a la víctima.