La pequeña guerrera de 9 años combatió hasta el final la enfermedad; “se fue feliz y tranquila”, recuerda su madre, quien la acompañó en cada paso de su difícil batalla
Oscar Ballesteros
La Prensa
Tras combatir por prácticamente 1 año el cáncer de hueso, Ana Abigail Amaya Romo falleció a sus 9 años, poco más de 2 semanas después que su padre; a pesar de sumar muchos esfuerzos para su tratamiento, la pequeña no soportó un osteosarcoma, el cual ya le había causado la pérdida de una pierna.
Ana Karen Romo, madre de Ana Abigail, compartió que al final su hija se fue feliz y ella se quedó en paz, puesto que luchó hasta el final y ahora estará junto a su papá, quien partió también muy recientemente, así como ella dejará de sufrir, puesto que ya le manifestaba sufrir con algunas de las terapias médicas «era lo que ella me decía, que ya no quería piquetes».
“Se fue tranquila, muy tranquila y muy feliz, muy contenta con muchos amigos, le gustaba mucho hacer amigos, de hecho, me encargó, me dijo «mami si yo me llego a ir, le hablas a La Tropa Estrella» (…) sí estoy más tranquila porque la vi y sé que ella está tranquila, en paz, ya no está sufriendo, ya no hay piquetes, era lo que ella me decía, que ya no quería piquetes” explicó la madre.
Esta calma no estuvo todo el tiempo -agregó- puesto que los últimos 2 días, Ana Abigail se mostró muy inquieta, por más que intentaran tranquilizarla les resultaba imposible, sin embargo, esto se veía afectado por las condiciones en que se encontraba ya la menor, aunque intentaba con toda su energía caminar o sentarse por ella misma, ya le era imposible.
“Sus últimos días estuvo muy inquieta, tenía 2 días así y ya no quería nada, yo la trataba de calmar, de tranquilizarse, pero no se podía estar quieta, ya hasta que le ponían medicamento se quedaba dormida, pero era mucho la inquietud de ella de levantarse, quererse sentar, pero no podía, sus defensas ya no se lo permitían, se decaía y sólo estaba acostada” finalizó Ana Karen Romo.