Mujer aseguraba haber hablado por teléfono con su suegra, cuando ella ya había fallecido
Alexis Massieu
La Prensa
Debido a la gran cantidad de mentiras que plasmó en sus denuncias, entre ellas, la de haber hablado por teléfono con su suegra ya sin vida, un juez penal decidió el día de ayer, dictarle un auto de no vinculación a proceso, a un hombre de la tercera edad que estaba acusado de cometer el delito de violencia familiar.
Fue en sala uno del Centro de Justicia Penal, donde se llevó a cabo la segunda parte de la audiencia inicial en contra de Raúl “N”, quien fue acusado de causarle todo tipo de desperfectos a la víctima de nombre María del Carmen, en su carro y en su casa, muchos de esos daños hechos con un taladro durante la madrugada.
En esta segunda audiencia relativa a la causa penal 96/2024, le tocó el turno a la defensa del imputado, de dar contestación a los señalamientos hechos por la presunta afectada, empleando fotografías, un documento con el que se acreditó el fallecimiento de quien fue su suegra, y sus propias palabras para exhibir un gran número de contradicciones y mentiras.
Para María del Carmen, Raúl “N”, es responsable de prácticamente todos los daños y desperfectos que tiene en su casa, incluyendo las goteras, que le habría provocado con un taladro, subiéndose al techo y perforando la losa durante la madrugada, para lo cual tuvo que saltarse una barda, pese a sus 63 años de edad y sus padecimientos de salud.
Todas y cada una de las agresiones—dijo–las presenció desde la ventana de su casa, y sin embargo, nunca hubo algún testigo, incluyendo cuando supuestamente, Raúl acudió para dañarle el carro, pegándole con una varilla, en el cofre, averiándole un faro, el claxon, y el autoestéreo, el cual luego reapareció, suponiendo ella, que el acusado regresó para ponerlo de nueva cuenta en el coche.
La víctima denunció que en cada una de las ocasiones que supuestamente Raúl fue a su casa en la colonia Anáhuac, ella le habló a la policía, y que una de esas veces, le respondieron que no podían ir, porque nada más tenían una patrulla, y esa unidad no tenía gasolina, sin embargo, en el C4, donde se atienden las llamadas al 911, indicaron que no tenían registro alguno de haber recibido esos reportes.
María del Carmen, también mintió al hablar de su relación con el acusado, ya que aseguró que vivieron en unión libre, pero; su propia hija, quien vive a un lado de su casa, y no fue testigo de ninguna de las “agresiones” declaró que no fue cierto, y lo suyo con Raúl, fue sólo un noviazgo.
La peor y más grave de todas las mentiras que se evidenciaron, fue la que dijo para justificar que con permiso de su suegra, fue hasta su casa donde también vivía el acusado, de lo cual existe una fotografía; permiso que aseguró lo obtuvo cuando le marcó por teléfono a la Señora Juanita el 10 de diciembre del año pasado, sin saber que quien fue su suegra, había fallecido el 5 de octubre, y su velorio se había realizado en San Antonio Texas.
Ya fuera porque se demostró que todos los daños en su casa eran producto de una mala construcción o de la falta de mantenimiento, que era imposible que un adulto mayor se estuviera saltando la barda a cada rato, y se subiera al techo para taladrarlo sin tener conexión eléctrica y sin despertar a los vecinos, el juez llegó a la conclusión que lo denunciado por María del Carmen no quedó demostrado en lo más mínimo, dictando el auto de no vinculación.
Si bien, se asentó que el Ministerio Público podría—en caso de recabar “más” pruebas—realizar una nueva acusación, nada se dijo, sobre si el afectado actuará o no, legalmente en contra de su ex novia, por las declaraciones falsas que hizo ante el Ministerio Público, y que fueron llevadas ante el juez penal, como ya ocurrió en otro caso de violencia familiar.