En un juicio en que no tuvo oportunidad de defenderse, la acusada de despojo, recibió la sentencia por parte de la jueza penal
Alexis Massieu
La Prensa
Tras ser declarada culpable de cometer el delito de despojo, dentro de un juicio oral en el que no tuvo la oportunidad de defenderse, la sentenciada Perla Yadira “N”, decidió desalojar la casa donde vivía, para entregarla el día de hoy al afectado, cuando se lleve a cabo la audiencia de individualización de la pena.
Fue la mañana de ayer, cuando se autorizó el diferimiento de la audiencia en la que la Jueza Anayanzin Adame Olmedo, iba a decidir qué sanción se le iba a imponer a la sentenciada, ya que; de última hora Perla Yadira le hizo una propuesta al afectado, con la cual, él y el Ministerio Público estuvieron de acuerdo.
La propuesta que se confirmará hoy a las 14:00 horas en una audiencia virtual, consistió en entregarle a la víctima, de nombre Noé Heberto, el domicilio del despojo, además de pagarle parte de los gastos del asesor legal que él contrató, con la entrega de 25 mil pesos, poniéndole así, el punto final al proceso penal identificado con el número 1325/2022.
Como se recordará, fue el pasado lunes, cuando se dio inicio al juicio oral en contra de Perla Yadira, por el delito de despojo, en el cual, a falta del abogado particular que la venía defendiendo, a Peerla Yadira se le asignaron dos defensores públicos, a los cuales se les concedió solamente, una hora y media para estudiar el caso, y preparar una estrategia que implicaba interrogar a 9 testigos y desahogar varias pruebas documentales ese mismo día.
Según la acusación hecha por el Ministerio Público: Noé Heberto adquirió la casa localizada sobre la calle Villa Latina, de la colonia Praderas del Sur, en el año 1987; mediante un crédito de INFONAVIT, casa en la que vivió durante 5 años junto a su esposa y sus pequeños, dado que en el año de 1992 se mudó a Saltillo.
Desde ese año, y hasta el 2015, la casa estuvo rentada y al cuidado de una vecina de nombre Juana Castro, a quien se la pidió porque iba a regresar a vivir ahí, y pese a que poco a poco fue llevando muebles para volver a habitarla, sus planes fueron interrumpidos en el año 2019 por la pandemia del Covid 19.
La víctima refirió, que durante todo el tiempo que la casa estuvo deshabitada, él acudía a ver cómo se encontraba cada dos o tres fines de semana, y no fue sino hasta finales del año 2021, que al llegar de Saltillo, y mientras se encontraba en casa de unos familiares en Monclova, su hija, quien se adelantó a ir al domicilio, le avisó que alguien se había metido.
El afectado refirió que la chapa de su casa estaba cambiada, y de ella salió Perla Yadira, quien les dijo que no se iba a ir de ahí, y que ella tenía comprobantes de que era suya, ante lo cual; para no tener problemas, decidieron retirarse, dando inicio a un proceso legal que tardó dos años en resolverse.
Tras darse a conocer el fallo de condena–el pasado martes–trascendió que Perla Yadira, en lugar de seguir peleando por la vía legal, con base a que no le permitió la Jueza Anayanzin Adame, tener una buena defensa, por negarse a darle tiempo suficiente a sus abogados de oficio para prepararse, optó por llegar a un acuerdo con la víctima, para zanjar el problema de una vez por todas y no darle más largas a ese asunto.