Por Milenio
La Prensa
El grupo delictivo al que aparentemente pertenecen las personas detenidas por el ataque al bar Bling Bling ha sido identificado como «independiente», de acuerdo con fuentes de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM),
Aunque en un inicio intentaron hacerse pasar como una célula del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), las investigaciones revelaron que esta afirmación fue falsa, aparentemente con el objetivo de desviar las pesquisas. Hasta el momento, no se han encontrado vínculos claros con organizaciones criminales conocidas.
El ataque del 10 de noviembre en el bar Bling Bling dejó un saldo de seis personas fallecidas y varios heridos. Entre las víctimas se encontraban El Oso y El Gory, quienes, según las indagatorias, mantenían lazos con una célula delictiva previamente involucrada en un multihomicidio en Jilotepec, el 8 de octubre. En ambos eventos, las autoridades detectaron el uso de armas y vehículos que conectan a los perpetradores.
En el bar, los agresores llegaron en un automóvil rojo y dos motocicletas. Las investigaciones indican que El Cristian, miembro del grupo delictivo, proporcionó información sobre la presencia de las víctimas en el lugar, lo que desencadenó el ataque. Este mismo individuo estuvo involucrado en el evento de Jilotepec, donde se encontró un vehículo calcinado con los restos de seis personas.
Las autoridades señalan que este grupo delictivo, encabezado por El Remington y El Juárez, presuntamente opera como independiente, pues no se tiene conocimiento de relación con alguna organización criminal de alcance nacional u otra conocida en la región, por lo que este les habría permitido mantener un perfil más bajo y dificultar su rastreo, lo que aprovechan para desempeñar actividades como el narcotráfico, la extorsión y el control de ciertos territorios en Cuautitlán Izcalli.
Una característica distintiva es su uso de redes sociales y aplicaciones para coordinar operaciones y contactar clientes de narcóticos. Estos métodos incluyen la entrega a domicilio de drogas como marihuana y cristal, utilizando vehículos de transporte público o motocicletas. El grupo también ha adoptado estrategias como el uso de nombres de cárteles establecidos para desviar la atención de las autoridades.