Por Excélsior
La Prensa
«Yo te instruiré, yo te mostraré el camino que debes seguir; yo te daré consejos y velaré por ti (Salmos 32:8)»… o eso cree la Junta de Educación del Estado de Texas, que aprobó este viernes un controvertido plan para incluir enseñanzas basadas en la Biblia en las aulas de primaria. Aunque opcional, las escuelas que adopten este plan recibirán fondos adicionales, con los materiales disponibles para el próximo año escolar.
El gobernador republicano Greg Abbott expresó su apoyo a la medida, destacando que las lecciones, desarrolladas por la Agencia de Educación de Texas, se centran en el cristianismo y podrían enriquecer el aprendizaje de los estudiantes al incluir referencias bíblicas comunes en la literatura y la historia estadunidense. La Junta de Educación, compuesta por 11 republicanos y cuatro demócratas, aprobó preliminarmente el plan con una votación cerrada de 8-7. Entre los miembros que votaron a favor se encuentra un republicano designado recientemente por Abbott.
“Se dice que hay cerca de 300 frases comunes que en realidad provienen de la Biblia”, señaló Mary Castle, directora de relaciones gubernamentales de Texas Values. “Los estudiantes se beneficiarán al comprender estas referencias”.
Sin embargo, el plan ha generado preocupación entre padres, maestros y defensores de la libertad religiosa, quienes argumentan que las lecciones podrían alienar a estudiantes de otras religiones y violar la Primera Enmienda. Amanda Tyler, del Comité Conjunto Bautista para la Libertad Religiosa, calificó el material como “inapropiado para la edad y la materia”.
“Los niños son demasiado pequeños para distinguir entre una afirmación de fe y una cuestión de hecho”, advirtió Tyler.
Enseñar la biblia, un esfuerzo en estados republicanos
La decisión de Texas es el último ejemplo de un movimiento liderado por republicanos para introducir la religión en las escuelas públicas. En Oklahoma, el superintendente estatal ha impulsado la incorporación de la Biblia en los planes de estudio, mientras que en Luisiana, una ley para colocar los Diez Mandamientos en las aulas públicas fue bloqueada por un juez federal.
Matthew Patrick Shaw, profesor de la Universidad de Vanderbilt, señaló que este tipo de iniciativas enfrentan un delicado balance constitucional. “La pregunta es cómo Texas enmarcará esto para evitar violar la cláusula de establecimiento”, comentó.
El nuevo plan de estudios se implementará en un contexto de intenso debate sobre el papel de la religión en la educación pública. Los opositores temen que esta medida erosione la separación entre iglesia y estado, mientras que los defensores insisten en que enriquecerá el aprendizaje cultural e histórico de los estudiantes.
El resultado final podría depender de desafíos legales, ya que expertos prevén que grupos de derechos civiles presenten demandas para bloquear el programa. Por mientras, Texas se prepara para llevar estas enseñanzas a las aulas, marcando un punto clave en el debate nacional sobre religión y educación.