La tranquilidad de las personas que descansaban en las bancas se vio interrumpida la tarde de este lunes
Luis Ángel Estrada
La Prensa
La tranquilidad de la tarde se vio interrumpida ayer en la Plaza Zapopan, cuando un incendio de proporciones considerables desató el pánico entre las personas que descansaban en las bancas del lugar.
Las llamas, que surgieron de manera repentina, se propagaron rápidamente y amenazaron con alcanzar las instalaciones de la emblemática iglesia La Ermita, uno de los principales puntos de referencia histórica y cultural de la zona.
Testigos relataron que el humo comenzó a extenderse alrededor de las 13:00 horas, provocando que muchos abandonaran la plaza en busca de un lugar seguro. Otros, alarmados, llamaron de inmediato a los servicios de emergencia.
La rápida intervención del cuerpo de Bomberos fue crucial para evitar una tragedia mayor. Con equipo especializado y una coordinación eficiente, lograron controlar el fuego antes de que este causara daños significativos a las estructuras aledañas, incluida La Ermita.