Más de la mitad de su vida libró esta ingrata batalla –desde los 4 años- siempre acompañado por su familia
Oscar Ballesteros
La Prensa
Tras 6 años de pelea contra el cáncer Emiliano Loera Méndez, de apenas 10 años de edad, logró superar esta batalla y empezar su vida sin la necesidad de volver periódicamente a un hospital; al sufrir de leucemia linfoblástica aguda desde muy pequeño, ahora que ha superado la enfermedad, su familia lo está apoyando a entender todo lo vivido.
Actualmente el infante cursa el quinto grado de primaria en la escuela “Héroes de Nacozari”, ubicada en la colonia Bellavista en donde también tiene su domicilio; su madre, Liliana Esmeralda Méndez Ibarra, compartió parte de esta experiencia la cual catalogó como «la más difícil de su vida» y ahora empezarán a disfrutar con su hijo, prácticamente libre de este padecimiento.
“Durante el proceso fueron quimios, internamientos y muy pocas veces lo vimos decaído, triste, él siempre con su sonrisa y sus ganas de salir adelante, nos demostró que podíamos (…) a los 3 años de su tratamiento con quimioterapias el médico nos dice que el cáncer está dormido, tenemos que vigilarlo otros 3 años a que no regrese y ya ha finalizado” explicó la madre.
El cáncer le fue detectado desde los 4 años, cuando desde un mes de julio presentó un dolor de rodilla que avanzó hasta una decaída considerable en diciembre por lo que se le practicaron exámenes en la localidad y en Monterrey, teniendo el diagnóstico de leucemia y con esto empezaría la primera mitad de su tratamiento, consistente en quimioterapias.
Durante su procedimiento, tuvo el apoyo de muchas personas, incluyendo la Fundación Sonrisa quien le cumplió el sueño de conocer a Santa Fe Klan en Monterrey, mismo sueño que ha evolucionado con la noticia de haber superado su batalla pues la intención del pequeño Emiliano es continuar con sus estudios hasta convertirse en un militar.
“Hace 3 años él tuvo el sueño de conocer a Santa Fe Klan y gracias a la Fundación Sonrisa nos ayudaron y se hizo posible, lo llevaron a Monterrey, el artista lo pasa a su camerino, habla con él y le da regalos, ahorita él dice que su sueño es estudiar y ser militar” precisó su mamá.
Después de pasar por el largo proceso con esta enfermedad, su madre reconoció encontrar una familia entre todas las mamás que atraviesan el mismo proceso con sus hijos por lo que recomendó a todas las personas que estén en esta situación dejen vivir a sus hijos, que no los traten como enfermos y ellos serán los encargados de superar la batalla.
“Yo siempre les he dicho a las mamis en esta situación, para mí todas son familia, que nunca pierdan la fe, que estén tomados de la mano de Dios y no traten a sus hijos como enfermos, que los dejen ser, son niños, no podemos quitarles su vida, no porque se le cayó su pelito no lo vas a sacar a pasear, tienen que ser niños” finalizó Liliana Méndez.