La mutación ocurrió en un paciente en Luisiana en el que es hasta ahora el único caso grave reportado por las autoridades de EU.
Un análisis genético sugiere que el virus de la gripe aviar mutó en un paciente de Luisiana que presentó el primer caso grave de esa enfermedad en Estados Unidos, informaron esta semana los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Los científicos piensan que las mutaciones podrían permitir que el virus se una mejor a los receptores en las vías respiratorias superiores de los humanos.
El CDC señaló que si bien esta mutación en el virus de la gripe aviar es preocupante, no es motivo de alarma.
¿Qué significa que la mutación del virus de la gripe aviar?
Michael Osterholm, investigador de enfermedades infecciosas de la Universidad de Minnesota, comparó esta interacción con una cerradura y una llave. Para entrar en una célula, el virus de la gripe aviar necesita tener una ‘llave’ que gire la cerradura, y este hallazgo significa que podría estar cambiando para obtener una que podría funcionar.
”¿Esto indica que podríamos estar más cerca de ver un virus que se transmite fácilmente entre personas? No”, aclaró Osterholm. “En este momento, esta es una llave que está en la cerradura, pero no abre la puerta”.
El virus de la gripe aviar ha causado enfermedades esporádicas, en su mayoría leves, en personas en Estados Unidos, y casi todos los infectados trabajaban en granjas lecheras o avícolas.
¿Qué sabemos del único caso grave de gripe aviar en humanos en EU?
El paciente de Luisiana fue hospitalizado en estado crítico con síntomas respiratorios graves causados por la gripe aviar tras entrar en contacto con aves enfermas y muertas en un corral trasero.
La persona, que no ha sido identificada, tiene más de 65 años y problemas médicos subyacentes, reportaron las autoridades a principios de este mes.
Los CDC enfatizaron que no ha habido ninguna transmisión conocida del virus del paciente de Luisiana a ninguna otra persona. La agencia indicó que sus hallazgos sobre las mutaciones eran “preocupantes”, pero el riesgo para el público general por el brote “no ha cambiado y sigue siendo bajo”.
Aun así, Osterholm subrayó que los científicos deberían observar atentamente lo que ocurre con las mutaciones.
“Habrá más pandemias de influenza, y podrían ser mucho peores de lo que vimos con el COVID”, dijo. “Sabemos que el reloj de la pandemia está avanzando. Solo que no sabemos qué hora es”.