Año Nuevo es el momento perfecto para realizar todo tipo de rituales gracias a la fuerte energía que se desprende de la temporada. Desde aquellos para atraer dinero hasta otros para encontrar el amor, existen todo tipo de tradiciones con las que las personas buscan comenzar el siguiente año cubiertos de buena fortuna y para lograrlo es importante cuidar cada detalle, incluso, el color de la ropa que se usará para tan importante noche.
Existen un sinfín de rituales que se enfocan en lo que cada una de las personas desea atraer para el nuevo año, entre los más populares destaca el dinero, el amor, el éxito y la prosperidad. Para ello hay dos colores en las prendas que nunca pueden faltar en los atuendos: el amarillo y el rojo, sobre todo en la ropa interior ya que se considera que atraen el abundancia en el dinero y el amor, respectivamente.
Aunque, así como hay colores que atraen energía positiva y brindan un resultado favorecedor cuando se trata de pedir deseos, también existen otros que tienen el efecto contrario en quienes los usan y corren el riesgo de alejar aquello que tanto anhelan. Por ello, es importante tomar en cuenta cada detalle cuando se trata de elegir el atuendo que se usará durante la celebración de Año Nuevo.
El color de ropa que se debe evitar en Año Nuevo
El color negro suele ser el más popular durante las fiestas decembrinas ya que en la industria de la moda es símbolo de elegancia y glamour, además de ser un básico para cualquier guardarropa. Sin embargo, durante Año Nuevo es recomendable no usarlo ya que se considera que bloquea la energía positiva y atrae obstáculos, además de que se asocia con el luto y la tristeza.
Otro de los favoritos tanto para Navidad como para la fiesta de Año Nuevo es el color blanco, pues se puede combinar con cualquier otro tono y saca de apuros a quienes no deciden su atuendo. Aunque también puede estar asociado con la falta de energía, estancamiento y las despedidas, por lo que no es recomendable usarlo durante esta temporada.
El morado es otro de los tonos que se deben evitar durante el último día del año, pues puede limitar las conexiones sociales y aumentar el aislamiento. Aunque el rosa puede parecer inofensivo cuando se trata de atraer energía se convierte en el peor enemigo, pues se ha señalado que éste en tonos pastel está relacionado con la desconfianza y el desequilibrio en las relaciones.