Tras 10 años de ausencia, regresan y encuentran un ecosistema saludable en todos los municipios del Estado
Alonso Crisante
LA PRENSA
SALTILLO, COAHUILA.- Coahuila ha experimentado una notable recuperación en su población de osos negros, una especie que estuvo al borde de la extinción hace apenas diez años. Actualmente, estos animales se encuentran distribuidos por casi todo el estado, con ejemplares en la mayoría de los municipios, lo que representa una señal positiva para la salud de los ecosistemas locales.
De acuerdo con Daniel González, titular de Vida Silvestre de la Secretaría del Medio Ambiente de Coahuila, la presencia de osos saludables en la entidad es una prueba de que el ecosistema está en buen estado. En particular, destacó que no se han encontrado ejemplares con mal estado físico, lo cual es un indicativo de que los animales no están bajando a las áreas urbanas por falta de comida, sino que lo hacen como parte de su comportamiento natural.
“Hace unos años los osos estaban muy flacos debido a la sequía, pero gracias a las lluvias, la población se encuentra muy sana, con ejemplares más robustos”, explicó González. Sin embargo, advirtió que la creciente presencia de osos en las ciudades puede generar nuevos desafíos, similares a los enfrentados en Nuevo León, donde los animales también han empezado a ingresar a áreas urbanas en busca de alimento.
El gobierno estatal ha respondido a esta situación con un enfoque de colaboración entre los tres órdenes de gobierno, incluyendo Protección Civil, la Policía Ambiental, la Secretaría del Medio Ambiente, la Conam y Profepa. González señaló que se está trabajando en la coordinación de esfuerzos para monitorear a los osos y evitar problemas de seguridad con la población.
A pesar de la buena noticia de la recuperación de la especie, el funcionario hizo un llamado a la conciencia pública para enseñar tanto a las personas como a los osos a convivir de manera segura. Se hace énfasis en que los habitantes de las zonas rurales, en particular aquellos con cabañas, no deben dejar basura afuera ni alimentar a los osos, ya que esto podría fomentar la interacción directa y poner en riesgo tanto a los animales como a los seres humanos.
Por ahora, las autoridades seguirán monitoreando la evolución de la población de osos y tomando medidas para asegurar que su presencia en el estado no interfiera con la seguridad y bienestar de la comunidad.