Intenta no ser detectado por Protección Civil y se niega a ser trasladado al albergue. Sólo acepta café y cobijas
Alberto Rojas Carrizales y Fabiola Sánchez
LA PRENSA
Entre aislados sorbos de café que aún humea en un vaso desechable pese a las bajas temperaturas, el indigente Alfredo asegura que es feliz y que el frío no le afecta en su escondite de la calle Del Paso donde intenta no ser detectado por Protección Civil, teme su alojamiento en ese refugio municipal.
El viento con lluvia fría que hiere y castiga, no le afecta porque ya hasta instaló su recámara al exterior de las antiguas instalaciones del INE en la colonia Primero de Mayo. En un colchón con deterioradas cobijas ahí duerme, sin mirar al reportero asegura que tiene todo lo indispensable para subsistir.
Aparentemente la esquizofrenia lo blinda de la onda gélida, generosos vecinos del sector le llevan tacos protegidos en papel aluminio, en su diestra sostiene el alimento, pero ni siquiera abre el envoltorio, cuando le sugieren su traslado a algún alojamiento frunce el ceño, su mirada refleja enojo y guarda silencio.
Casos así hay muchos en distintos sectores de Monclova, nadie conoce su historial, ni a sus familiares, cuando los vecinos les sugieren llamar a autoridades para pernoctar en un sitio cálido, bebidas y alimentos calientes y por si fuera poco calefacción en la Central de Bomberos, con lenguaje corporal rechazan molestos la opción.
En tanto, Protección Civil Municipal peina la ciudad escaneando sitios de indigentes para alojarlos en la Central de Bomberos, pero ellos se resisten como si disfrutaran el frío, la lluvia helada y suciedad.
VECINOS INTENTAN AYUDARLO
La situación fue reportada por vecinos de la colonia Primero de Mayo, quienes alertaron a las autoridades sobre la presencia del indigente que duerme sobre la banqueta de la calle Del Paso, esquina con Enrique Duarte.
Elementos de la Policía Municipal y personal de Protección Civil se acercaron al lugar para dialogar con el hombre y ofrecerle ser llevado al refugio temporal, debido a las bajas temperaturas que se han presentado en la localidad, no obstante, el adulto mayor se negó a aceptar el traslado, prefiriendo continuar durmiendo en la vía pública.
Ante la negativa, las autoridades optaron por entregarle cobijas adicionales para que pueda mantenerse abrigado durante las bajas temperaturas, además, se ha implementado un monitoreo constante para seguir brindándole apoyo y resguardar su integridad física en caso de que cambien las condiciones climáticas o decida aceptar el resguardo en el albergue.