Trump ha amenazado con imponer aranceles a sus socios comerciales México y Canadá, pero también a China.
Donald Trump, que tomó protesta como presidente de Estados Unidos este 20 de enero, no revelará aranceles específicos para China en su primer día en el cargo, ya que la administración entrante comienza con un posible compromiso con Beijing en lugar de iniciar otra guerra comercial, según personas familiarizadas con el asunto.
La decisión de no atacar inmediatamente a China este lunes refleja un cambio del presidente entrante hacia un modo negociador y un afán por llegar a otro acuerdo con el presidente chino Xi Jinping, dijo una persona familiarizada con la decisión.
En lugar de ello, Trump pedirá que las agencias federales estudien las políticas arancelarias y la relación comercial de Estados Unidos con China, Canadá y México, según los funcionarios entrantes de la Casa Blanca de Trump.
La medida planeada, reportada primero por el Wall Street Journal y confirmada por funcionarios de Trump, no impondrá nuevos aranceles este lunes, pero podría preparar el terreno para aranceles comerciales en las próximas semanas o meses.
Trump ha dicho que podría firmar hasta 100 órdenes ejecutivas este lunes. Sus funcionarios dijeron que esas órdenes también incluirán medidas para frenar la inflación y reducir las regulaciones, en particular las relacionadas con la producción de petróleo y gas.
Hace algunos días, Trump dijo que creará un servicio de ingresos externos y se espera que ordene a las agencias que estudien la viabilidad de este y que recomiende cómo diseñarlo e implementarlo, según una persona familiarizada con el asunto. Sería una nueva agencia que recaudaría los ingresos arancelarios.
No está claro en qué se diferenciará del sistema federal actual, en el que el secretario del Tesoro establece las normas de recaudación de aranceles y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza las administra en los puertos de entrada.
Durante su primer mandato, Trump negoció un acuerdo comercial de “fase uno” con Beijing que puso fin a años de aranceles recíprocos, pero pocas de las compras prometidas por China de productos estadounidenses se materializaron. La ceremonia de investidura de Trump está prevista para alrededor del mediodía en Washington.
El dólar cayó ante la noticia de que Trump se abstendría de implementar aranceles agresivos de inmediato, y un indicador de Bloomberg del dólar extendió las pérdidas a alrededor del 1.2 por ciento, en camino a su mayor caída diaria desde noviembre de 2023.
Los inversores han especulado que una guerra comercial sería positiva para el dólar, dado que probablemente dañaría a las economías extranjeras más que a la estadounidense, limitaría la demanda estadounidense de bienes internacionales y aumentaría el estatus de refugio seguro de la moneda. Los futuros de acciones estadounidenses subieron.
Algunas personas familiarizadas con la decisión advirtieron que Trump suele cambiar rápidamente de opinión sobre su estrategia y podría decidir nuevamente seguir adelante con sus planes originales de atacar a China. Aun así, las acciones del lunes sugieren un enfoque más deliberado que la retórica encendida sobre los aranceles que Trump ofreció durante su campaña el año pasado.
Amenazas arancelarias de Trump impactarán la economía de EU
Los analistas afirman que los aranceles de Trump —que ha amenazado con aplicar a adversarios y aliados por igual— tendrán uno de los mayores impactos en la economía estadounidense. El autoproclamado “hombre arancelario” impuso aranceles sobre importaciones por un valor de unos 380 mil millones de dólares en su primer mandato. Durante la campaña electoral, prometió medidas mucho más amplias, incluido un cargo del 10 por ciento al 20 por ciento sobre todos los bienes importados y del 60 por ciento sobre los productos chinos.
También prometió un arancel del 25 por ciento sobre todos los productos de Canadá y México, y un arancel adicional del 10 por ciento sobre los productos chinos, lo que dice tiene como objetivo incitar a esos países a detener el flujo de personas migrantes sin documentos y drogas ilegales hacia Estados Unidos.
Es discutible si los aranceles servirán para cerrar el déficit comercial, reactivar la producción o poner fin a cualquier crisis. Muchos economistas son escépticos. Es más probable que, a corto plazo, los aranceles conduzcan a una mayor apreciación del dólar, aumenten el costo de las importaciones y aumenten los ingresos del gobierno, al menos inicialmente.
POR: EL FINACIERO